El Salvador acumula 365 días sin homicidios en lo que va de presidencia de Bukele

El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, anunció haber logrado sumar 365 días, un año entero, sin que se registren homicidios en El Salvador a lo largo de los últimos cuatro años. Ningún otro presidente habría logrado este hito en la historia del país, que antes de la llegada de Bukele al poder experimentaba unas altas tasas de violencia por la actuación de las maras. Ahora, el Gobierno salvadoreño presume de contar 1,8 homicidios por cada 100.000 habitantes, la menor tasa de América Latina.

El dato que celebra Bukele no significa que no se hayan producido homicidios en el último año, sino que en los casi cuatro años de mandato del "presidente bitcoin" lleva acumulados 365 días no consecutivos sin asesinatos. De acuerdo con los datos expuestos por la Policía Nacional Civil salvadoreña, en lo que va de mayo aún no se ha producido ningún crimen mortal. Un comunicado de la Presidencia salvadoreña destaca que entre 2009 y 2019, los diez años previos al mandato de Bukele, hubo sólo un día sin homicidios y un promedio de 30 asesinatos diarios.

El anterior mes de abril, el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Guillermo Villatoro, anunció que el mes había tenido 24 días sin registrarse un solo homicidio. Los 10 asesinatos de ese mes hicieron de abril el mes "más seguro de la historia de El Salvador", de acuerdo con la mano derecha de Bukele. Los datos de crimen mejoran en El Salvador desde que el Gobierno de Bukele pusiera en marcha su plan de control territorial para luchar contra el crimen.

El descenso de los homicidios en El Salvador fue más significativo cuando el actual presidente convirtió su guerra contra las maras en su mejor baza para ganar popularidad. En marzo de 2022, el Gobierno declaró el estado de excepción con el que obtiene los recursos para controlar el país. Varios centros de detención especial con capacidad para miles de reos fueron construidos en el país con el fin de albergar a los delincuentes de las maras.

Pese a las repetidas denuncias de organizaciones internacionales por los derechos humanos, la popularidad y valoración positiva de Bukele crecieron después de su declaración del estado de excepción. De acuerdo con las consultas de Gallup, Bukele sería el líder democráticamente elegido con mejor valoración de sus votantes en toda Hispanoamérica con un 92% de apoyo popular.