Así gestó Kansas City Chiefs su conquista del Super Bowl LVII
Patrick Mahomes está destinado a ser el quarterback estrella de la NFL en los próximos años.
En un partido tan igualado como cabía esperar, los Kansas City Chiefs se impusieron a los Philadelphia Eagles (38-35) en la LVII edición del Super Bowl. La defensa de los Eagles (considerada por muchos la mejor defensa de la NFL) se arrugó en muchas fases del encuentro, cometiendo errores imperdonables en sus coberturas y no consiguiendo ninguna captura sobre un limitado Patrick Mahomes.
El partido comenzó como si de un combate se tratase, los Philadelphia Eagles de Jalen Hurts, apoyados en su poderosa línea ofensiva y en su juego de carrera conseguiría el primer touchdown en el marcador ante la pasividad de la defensa de Kansas City que fue de menos a más durante el encuentro.
La respuesta de Kansas no se haría esperar: Patrick Lavon Mahomes II, con la ayuda también de su línea ofensiva, solo necesitaría poco más de tres minutos para recorrer 75 yardas y lograr un touchdown al conectar el quarterback con su objetivo favorito: Travis Kelce. La pizarra de Andy Reid dejo en evidencia a la defensa de Philadelphia, con un concepto tan sencillo como un motion al stack. Y aquí estuvo la clave del partido: la defensa de los Eagles fue incapaz de ajustar sus coberturas durante todo el encuentro.
Segundo cuarto
El segundo cuarto no podía empezar mejor para los Eagles, Hurts lanzó uno de sus característicos pases a A.J. Brown, una bomba de 45 yardas para touchdown, en el que el receptor se deshizo de su doble marca con facilidad para conseguir la anotación.
Los Eagles parecía que se estaban haciendo con el partido y los Chiefs no conseguían mover cadenas, hasta que Hurts cometió un error de novato: perdió el balón en una carrera cuando intentaba cambiarlo de mano, para que Nick Bolton retornara la perdida de balón para touchdown. El linebacker de los Chiefs, que lideró al equipo en placajes, jugó a un gran nivel y ponía la igualdad en el marcador (volviendo a meter a su equipo en el partido cuando más lo necesitaba).
Pero ante este ataque los Eagles, lejos de venirse abajo, volvieron al campo para jugar una serie de 15 jugadas que terminaría con el segundo touchdown de Hurts. En este momento, la línea ofensiva de los Eagles parecía imparable, y Hurts, que a pesar del fumble y de algún error puntual de lectura, terminaría el primer periodo con 3 touchdowns, 13 de 16 en pases y un total de 206 yardas.
Todo parecía ponerse aún más de cara para los Eagles, cuando al final de primer periodo, Mahomes se resentía del tobillo que le lleva lastrando casi un mes. Tras conseguir un nuevo field goal, los Eagles vencían al descanso por 10 puntos, y tenían el total control del partido y acumulando un tiempo de posesión ofensiva de 22 minutos, frente a los 8 de Kansas y Mahomes se retiraba a los vestuarios visiblemente dolorido. Parecía difícil que su segundo Super Bowl se le pudiese escapar a los de Philadelphia.
Segundo periodo
Pero los de Kansas no se iban a rendir fácilmente. A la vuelta de los vestuarios, Mahomes jugaba sin ya aparente dolor en su tobillo y en la línea ofensiva seguían realizando un partido prácticamente perfecto. Entonces, Travis Kelce y el corredor Isiah Pacheco eran un verdadero dolor de cabeza para la defensa de Philadelphia. El corredor rookie de séptima ronda tuvo una actuación sobresaliente en el Super Bowl con 76 yardas de carrera y un touchdown. Fuel el mismo Pacheco el que culmino el primer drive con una carrera de una yarda para touchdown.
Los Eagles intentaron seguir con su plan de juego, que no era otro que evitar que Mahomes tuviera el balón mediante posesiones largas, pero esta vez tras una serie ofensiva de casi 8 minutos solo encontrarían la recompensa de un field goal. Al final del tercer cuarto los Eagles vencían por 6 y el partido estaba más abierto que nunca.
Remontada
Y fue en ese momento cuando Andy Reid decidió incidir en los errores de bulto de cobertura que los Eagles habían mostrado, consiguiendo con un simple motion de Kadarius Toney dejar al receptor completamente solo para conseguir el touchdown que los ponía por delante en el marcador. Resulta complicado entender, como la que había conseguido ser la mejor defensa contra el pase durante la temporada regular, cometía estos errores en los cambios de asignaciones defensivos.
Sería el mismo Toney el que unos minutos después retornó un despeje de los Eagles hasta su yarda 5. Kansas no desaprovecharía la oportunidad y volvería a dejar en evidencia a la defensa de los Eagles con una nueva jugada de motion que dejaba libre esta vez de toda marca al receptor rookie Skyy Moore. Los Chiefs se ponían 8 puntos por delante.
Los Eagles que no se habían encontrado por detrás en el marcado en todos los playoffs no se vinieron abajo y Jalen Hurts conectaría otro pase de 45 yardas marca de la casa con DeVonta Smith que los dejaba en la yarda 2 de Kansas City. Tras una nueva Qb sneak de Hurts, los Eagles se ponían a tan solo dos puntos por debajo, obligados a realizar una conversión, volvieron a apostar por una carrera de Hurts que dejaba el marcador empatado a 35 y con 5:15 para el final del encuentro.
Con el ovoide en manos del ataque de los Chiefs, los Eagles no conseguían parar a Mahomes que, con una carrera de 26 yardas, conseguía el primer down en la yarda 17 de los Eagles.
Chiefs, campeones
Fue entonces cuando los árbitros, que ya habían tomado alguna decisión más que dudosa durante el partido, decidieron castigar en una tercera oportunidad, un ambiguo holding defensivo de James Bradberry a Smith-Schuster. Esta decisión ya dentro de los two minutes warning, terminó por decidir el partido. Los de Kansas se dedicaron a gestionar el reloj, para que Butker (a falta de 8 segundos) consiguiera el definitivo 38-35 para el equipo de Andy Reid. La decisión fue polémica: lejos de definir el juego, sí que acabó enturbiando el resultado final y un partido que había sido una batalla apasionante desde el primer snap.
Mahomes fue elegido MVP de la final. Sin embargo, cualquiera de sus líneas ofensivos hizo méritos más que suficientes para compartir este trofeo con el quarterback. Patrick Mahomes ya ha conquistado dos Super Tazones y dos MVP de la final en los cinco años que lleva siendo el quarterback titular de Kansas, y está destinado, si Joe Burrow no tiene nada que decir al respecto, a ser el quarterback estrella de la NFL en los próximos años.