Son varios los argumentos que justifican la rivalidad entre Estados Unidos y China generada por querer ser la mayor potencia mundial: asuntos económicos, comerciales o geopolíticos, entre otros, la atestiguan. Tal es esa confrontación que, desde Washington, D.C., se presta especial atención a los movimientos en todos los ámbitos que lleve a cabo el régimen comunista de Xi Jinping para no verse sobrepasado. De hecho, no solo desde la Casa Blanca se observa, también entre los estadounidenses, quienes consideran al gigante asiático como el mayor enemigo.
Según una encuesta de Gallup, los ciudadanos volvieron a designar a China como el mayor rival al que se enfrenta Estados Unidos, aunque porcentualmente son menos que el año pasado los que así lo señalan. En 2024, un 41% de los estadounidenses calificó al régimen comunista como el principal enemigo, por un 50% que lo marcó en 2023.
Algunos hechos respaldan la afirmación de esos más de cuatro de cada diez ciudadanos, como la entrada descontrolada en el país de chinos a través de la frontera sur -la mayoría de ellos hombres en edad militar, lo que causa una mayor preocupación- o aquel globo espía procedente de Pekín que sobrevoló el espacio aéreo norteamericano. También existe preocupación con TikTok, la red social china sobre la cual el Congreso está avanzando en su prohibición absoluta, por ser una herramienta útil para que China controle y adquiera datos de los estadounidenses.
Si dividimos a la población por ideología o afinidad política, nos encontramos con dos posiciones totalmente opuestas respecto a quién consideran como el principal enemigo de los Estados Unidos. El 67% de los republicanos y el 40% de los independientes posicionan a China como el máximo adversario, mientras que esa afirmación es respaldada por el 18% de los demócratas.
Rusia cae y Oriente Medio crece
Después de que China fuese señalada como el principal enemigo en el cómputo global por el 41%, el 26% de los estadounidenses posicionaron a Rusia como la mayor amenaza, aunque, como en el caso de China, este registro también disminuye respecto a 2023. El año pasado, la nación liderada por Vladimir Putin -quien acaba de garantizarse un mandato más al frente del Kremlin- fue seleccionada como el gran adversario por el 32% de los encuestados.
El comienzo de la guerra en Gaza -fruto de los ataques perpetrados por el grupo terrorista Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023- incentivó la preocupación de los estadounidenses sobre Oriente Medio. En concreto, sobre un país: Irán. El ser elegido como la mayor amenaza para los estadounidenses -y más aún cuando interfiere en el conflicto en Gaza con amenazas directas al país y respaldando a otros grupos terroristas para que ataquen a buques comerciales- se disparó del 2% en 2023 al 9% en 2024. Otro país de la región que también incrementó ese registro fue Iraq (1%).
Estados Unidos, ¿la mayor amenaza para los estadounidenses?
Lo más curioso del sondeo es ver cómo el porcentaje de encuestados que identifica a Estados Unidos como la mayor amenaza para sí mismo se incrementó de un año para otro. En 2023, lo afirmó el 1% de los ciudadanos. En el último registro, lo atestiguó el 5%.
Que Corea del Norte es el mayor enemigo del país lo señala el 4% de los ciudadanos (tres puntos menos que en 2023), mientras que Israel y Ucrania subieron dos puntos respecto al año anterior.
