La candidata republicana a gobernadora de Arizona, Kari Lake, empezó el año 2023 presentando una petición para apelar la desestimación de la impugnación electoral. La expresentadora de televisión estadounidense no perdió el tiempo y nada más empezar enero compartió a través de su cuenta oficial de Twitter que llevó su solicitud ante la Corte Suprema de Arizona.
Lake ya había anunciado que no estaba de acuerdo con la decisión de la Corte Superior del condado de Maricopa que falló en contra de su demanda que alegaba mala conducta electoral intencional en un proceso en el que el margen de los votos entre las candidatas era muy corto.
Arizona First means fighting for Honest Elections. pic.twitter.com/yD7tm7EMQg
— Kari Lake (@KariLake) December 30, 2022
En aquel momento, el juez que desestimó la demanda dijo que no se había encontrado evidencia clara o convincente que demostrara que hubo fraude en las elecciones de 2022. Sin embargo, Lake señaló que presentó suficientes evidencias, incluyendo el testimonio de expertos. “Proporcionamos expertos. El otro lado trajo activistas para tratar de salvar las apariencias. Admitieron que sabían sobre estos problemas en las boletas”, manifestó.
Estrecha derrota
En la contienda por la gobernación de Arizona, la demócrata Katie Hobbs salió victoriosa tan solo por unos 17.000 votos en un proceso en el que hubo un mal funcionamiento de la impresora de las papeletas. Aunque la candidata republicana no afirma que el presunto fraude le haya costado la elección, considera que los problemas con el sistema pudieron haber contribuido en los resultados, pero esto no es todo, pues Lake afirma que todo se trató de una manipulación deliberada.
With a 17k margin between @KariLake and Hobbs, these 3 points should immediately call for a new election to be held in Arizona.
- No chain-of-custody for 300,000 ballots
- Inexplicable injection of 25k ballots
- Thousands of ballots with voters' signatures that don't match the- pic.twitter.com/8TUBpGOJcd— Merissa Hansen (@merissahansen17) January 1, 2023
De hecho, es precisamente por esta razón que la republicana insiste en que haya un proceso de elección “justo y transparente” que permita determinar con seguridad la decisión de los ciudadanos. “Una mayoría significativa de votantes ya no confía en los resultados de las elecciones en Arizona. Una república que funcione no puede salir adelante por mucho tiempo en estas circunstancias”, recordó Kari Lake a través de un retuit.
