España: el Congreso aprueba la polémica ley de amnistía

El Congreso de los Diputados -la Cámara Baja de España- aprobó la polémica propuesta de ley de amnistía impulsada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que servirá para indultar a todos aquellos políticos de partidos separatistas catalanes que delinquieron cuando convocaron un referéndum ilegal y proclamaron la República de Cataluña: unos hechos catalogados como actos terroristas por la Justicia. Esos delitos por los que serán perdonados los acusados corresponden a terrorismo, traición y malversación de fondos públicos.

Este jueves, la norma salió adelante, en una segunda votación, gracias al apoyo de 178 parlamentarios pertenecientes al Partido Socialista Obrero Español (PSOE, formación liderada por Sánchez); a Sumar (partido del que forma parte la vicepresidente segundo del Gobierno, Yolanda Díaz); a Esquerra Republicana de Catalunya (ERC, la izquierda independentista de Cataluña); a Junts per Catalunya (la derecha separatista catalana); a Podemos; al Bloque Nacionalista Galego (BNG); a EH Bildu (la izquierda independentista de la región del País Vasco); y al Partido Nacionalista Vasco (PNV).

Por su parte, 172 legisladores se opusieron en la votación, todos ellos integrantes del Partido Popular (PP), Vox, Coalición Canaria (CC) y Unión del Pueblo Navarro (UPN). Una vez aprobada en el Congreso de los Diputados, la ley pasará a manos del Senado.

La independencia, ¿el siguiente paso a la ley de amnistía?

La ley de amnistía era uno de los requisitos innegociables de los partidos políticos independentistas catalanes para respaldar la investidura de Sánchez. Entre sus exigencias, destacaba el indulto para todos aquellos que proclamaron, de forma violenta, la independencia de Cataluña en 2017: los principales líderes de aquel ilegal movimiento se marcharon de España y huyeron de la Justicia, entre ellos, el expresidente de la región Carles Puigdemont.

"La amnistía responde a un objetivo, que no es pasar página ni tocar un punto final, sino superar una etapa errónea de represión judicial y policial a un movimiento político, y convertir a la política definitivamente en lo que es la gestión de un conflicto de naturaleza política", señaló el todavía prófugo Puigdemont desde Bruselas (Bélgica), nada más conocerse la resolución de la votación.

Al margen, también insisten en la separación de Cataluña y constituirla como un país independiente. Durante la sesión parlamentaria previa a la votación de este jueves, Míriam Nogueras, portavoz de Junts per Catalunya, aseguró que "esto no es un punto final", ya que "nuestro objetivo sigue siendo la independencia de Cataluña". Similares palabras fueron las que utilizó ERC en boca de su portavoz, Pilar Valluguera, quien dijo que "no van a dejar de reclamar el derecho a la autodeterminación".

Sánchez siempre afirmó que la independencia de Cataluña jamás será una realidad. También llegó a asegurar, en su momento, que los líderes independentistas involucrados en la declaración ilegal de 2017 nunca iban a ser indultados. Este jueves, aquellos que delinquieron consiguieron su objetivo y el presidente del Gobierno faltó a su palabra una vez más.

Sánchez "ha vendido la soberanía de los españoles"

La oposición fue muy dura con el presidente del Gobierno y su formación por ceder a los intereses de una pequeña parte de la población del país. Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular y líder de la oposición, acusó a Pedro Sánchez y a sus compañeros del PSOE por "acatar" todas las exigencias del independentismo a cambio de presidir España una legislatura más. "Esta ley divide a España en dos y divide a Cataluña en dos", añadió desde la tribuna del Congreso de los Diputados.

A esas críticas se sumó Vox. El líder del partido conservador, Santiago Abascal, señaló directamente a Sánchez por "no tener ningún escrúpulo, ningún límite ni ningún principio" por "haber vendido la soberanía de los españoles".

Las manifestaciones de noviembre

En noviembre de 2023, millones de españoles salieron a las calles de todo el país para protestar contra una propuesta de ley que, este jueves, salió adelante. En Madrid, los ciudadanos se congregaron, durante días, en las puertas de la sede del PSOE, situada en la céntrica calle de Ferraz. Aquellas movilizaciones se saldaron con varios detenidos tras una fuerte represión policial. Se les acusó de atentado contra la autoridad y desobediencia civil.

Las manifestaciones fueron respaldadas por los principales partidos de la oposición: unos lo hicieron de manera más enérgica, como Vox, y, otros lo hicieron de una forma más prudente, como el PP. De hecho, esta última formación prefirió desmarcarse de aquellas movilizaciones frente a la sede del PSOE y convocaron, en otros lugares emblemáticos de las principales ciudades de España, sus propias manifestaciones.