En Fairfax (el condado más grande de Virginia) el robo de tiendas aumentó alrededor de un 42% respecto al año pasado. Allí, el fiscal Steve Descano -financiado con más de $600.000 por George Soros- decretó hace dos años que los delincuentes que roben artículos o dinero de los comercios por un valor inferior de 1.000 dólares no serían procesados.
El aumento de la delincuencia es sólo una de las razones por las que Decano -que fue elegido en 2019- enfrenta una petición de destitución. Sin embargo, él no es el único fiscal -de todos los respaldados por el magnate- que han recibido críticas por aplicar reformas progresistas en la justicia penal que contribuyen al aumento del crimen.
En Voz Media les hemos revelado muchos de estos casos y ahora, una investigación de Parker Thayer -periodista de CapitalResearch- pone en evidencia más casos de fiscales que con sus políticas en vez de luchar contra la delincuencia, la han incrementado la delincuencia en sus condados y ciudades:
Rachael Rollins, ex fiscal federal de Massachusetts
La gestión de la ex fiscal federal de Massachusetts Rachael Rollins dejó mucho que desear. La fiscal hasta creó una "lista de 15 delitos de bajo nivel" que favorecían a los delincuentes. Rollins fue una de las funcionarias financiadas por Soros que anunció su dimisión tras la publicación de un informe de la Oficina del Inspector General del Departamento de Justicia (DOJ) que denunció su conducta partidista y malas prácticas.
El documento acusó a Collins de participar en actos del Partido Demócrata, abuso de poder, ignorar la política de regalos y viajes del DOJ y, especialmente, de filtrar información interna del DOJ a periodistas para favorecer al candidato que ella respaldaba como fiscal de distrito de Boston.
Kim Gardner, ex fiscal de Circuito de San Luis
Kim Gardner fue una de las primeras fiscales que contó con el respaldo de Soros. Se denunció en reiteradas ocasiones que la ahora ex fiscal utilizaba su poder para enjuiciar a las personas que tenían opiniones contrarias a la suya "mientras permitía que los delincuentes quedaran libres".
Con sus medidas y políticas progresistas, la ciudad se convirtió en la capital de asesinatos del país. En 2021, ya fue considerada uno de los lugares más mortíferos del mundo. Sin embargo, a pesar de sus malos resultados en la lucha contra el crimen, Soros igual contribuyó a su reelección con $116.000.
Diana Becton, fiscal de Contra Costa, California
Diana Becton se convirtió -con su elección en 2017- en la primera mujer (y afroamericana) en hacerse con el cargo de fiscal del Condado de Contra Costa, California. Sin tener ningún tipo de experiencia previa como fiscal, Soros la respaldó con alrededor de $275.000.
En 2019, los delitos violentos aumentaron en el condado. Además, durante sus primeros años en el cargo cuatro ciudades del condado clasificaron en la lista de las 100 más peligrosas del estado.
George Gascon, fiscal de Los Ángeles, California
George Gascon es fiscal del Condado de Los Ángeles, California desde 2020. Fue financiado por Soros con 3 millones de dólares (una cifra criticada como excesiva).
Desde que empezó a ejercer su cargo, las medidas que tomó para reformar la justicia penal llevaron a la ciudad a experimentar una ola de crímenes nunca antes vista. Las tasas de homicidio se incrementaron, al igual que los robos en tiendas.
Además, en 2021 una noticia inundó los titulares, ya que una investigación desvelaba como se había disparado el consumo de drogas en las infraestructuras del transporte público del condado. Los reportes locales calificaban al metro como un "refugio móvil para los sin techo y drogadictos".
Kim Foxx, fiscal Condado de Cook (Chicago), Illinois
Kim Foxx es la fiscal del Condado de Cook (Chicago), Illinois desde 2016. Asumió el cargo con la ayuda monetaria de $2 millones provenientes de Soros.
La fiscal fue criticada por sus políticas de mano blanda contra la delincuencia generaron el mayor incremento de homicidios en Chicago en más de 30 años. A pesar de las cifras históricas de asesinatos, decidió retiró los cargos contra el 30% de los delincuentes que fueron acusados de delitos graves hace dos años.
Alvin Bragg fiscal de Manhattan, Nueva York
Alvin Bragg es el fiscal de Manhattan, Nueva York. Fue elegido en 2021. Para su campaña Soros donó alrededor de $1,1 millones.
Desde Bragg presentó en su programa de mandato, más de nueve fiscales en Manhattan renunciaron, ya que este incluye reducción de sentencias para delitos como tráfico de drogas, algunos robos y allanamiento de morada. Además, el fiscal es responsable de varias investigaciones y casos que se han llevado a cabo en contra del expresidente Donald Trump en Nueva York.
Larry Krasner fiscal de Filadelfia, Pensilvania.
El fiscal de Filadelfia (Pensilvania) Larry Krasner, recibió más de $2 millones de Soros. Bajo su gestión, la ciudad experimentó una histórica tasa de asesinatos que la convirtió en la capital de homicidios de la nación en 2021.
Durante sus primeros años, los republicanos de la ciudad denunciaron que la oficina del fiscal ha utilizado "inapropiadamente la discreción fiscal". Además de "no responder a la creciente violencia con armas de fuego en la ciudad y la cuestión general de la seguridad pública de los residentes de Filadelfia".
Soros defiende la reforma de la justicia penal
A pesar de que toda esta evidencia indica que las políticas progresistas implementadas por los fiscales financiados por el magnate no son eficaces para luchar contra la delincuencia, Soros afirmó que no tiene intención de renunciar a sus planes de reforma del sistema jurídico y penal y seguir usando sus redes para conseguirlo:
Me he implicado en los esfuerzos por reformar el sistema judicial durante los más de 30 años en los que me he dedicado a la filantropía. Lo he hecho de forma transparente, y no tengo intención alguna de dejar de hacerlo.
La profesora emérita de la Universidad George Mason Joyce Lee Malcolm comentó a Fox News que los cambios de los que habla el magnate sólo "conducen a más delincuencia":
Creo que se puede abusar de la palabra reforma. Significa cambiar algo, pero no siempre para mejor. Estos cambios no son para mejor, sino que conducen a más delincuencia... Si le preguntas a la gente si está a favor de la reforma, todo el mundo dice, "Oh, sí", asumiendo que la reforma está aludiendo a un mejor resultado. Pero el resultado aquí es desastroso.
