El FBI investiga el aumento de falsas alertas policiales contra conservadores

El FBI inició una investigación por el aumento de casos de swatting contra figuras conservadoras. Esta táctica de acoso consiste en realizar denuncias falsas sobre amenazas graves para provocar un operativo policial en la vivienda de la víctima.

El director de la agencia, Kash Patel, advirtió este viernes sobre el "alarmante aumento" de estos ataques contra figuras de los medios de comunicación y aseguró que el Buró ya está tomando medidas al respecto.

"El FBI está al tanto de esta peligrosa tendencia y ya estamos actuando para investigar y exigir responsabilidades a los culpables", afirmó Patel.

Asimismo, subrayó que el problema trasciende las diferencias políticas y supone una amenaza para la seguridad pública. “Usar a las fuerzas del orden como arma contra cualquier estadounidense no solo es moralmente reprensible, sino que también pone en peligro vidas, incluidas las de nuestros oficiales”, enfatizó.

El swatting ha tenido consecuencias fatales en el pasado, ya que la movilización de equipos tácticos en respuesta a información falsa puede derivar en enfrentamientos violentos e incluso muertes.

Ataques recientes contra comentaristas conservadores

Uno de los casos más recientes fue denunciado por el podcaster conservador Nick Sortor, quien informó que su padre y su hermana fueron víctimas de un ataque de swatting el jueves. "Una docena de policías intentaron derribar la puerta de mi padre a punta de pistola", escribió en X.

Según el podcaster, la llamada falsa aseguraba que su padre estaba "matando a toda su familia", lo que llevó a una respuesta con fuerza letal por parte de las autoridades. Sortor calificó el hecho como un intento de homicidio indirecto, alegando que los perpetradores buscaban provocar un enfrentamiento mortal con la policía.

Otro caso reportado involucró al presentador conservador Shawn Farash y su esposa, quienes también fueron víctimas de un operativo policial derivado de una denuncia fraudulenta. Farash afirmó que investigará lo sucedido y exigirá que los responsables enfrenten consecuencias legales.

Estos ataques no han estado limitados a figuras mediáticas. En diciembre, una falsa denuncia en la casa de la congresista republicana Marjorie Taylor Greene derivó en un accidente de tránsito mortal durante la respuesta policial.

Iniciativas legislativas para combatir el swatting

En respuesta a estos incidentes, un grupo de legisladores presentó en enero un proyecto de ley bipartidista que busca endurecer las penas contra quienes perpetren ataques de swatting. La iniciativa contempla hasta 20 años de prisión si alguien resulta gravemente herido o fallece debido a una denuncia falsa.

El representante Mike Ezell, con experiencia en cuerpos policiales, advirtió que este tipo de acoso no solo pone en peligro a ciudadanos inocentes, sino que también desvía recursos valiosos de emergencias reales. Por su parte, el congresista Brandon Gill calificó estos actos como "terrorismo político" y enfatizó la urgencia de erradicar esta amenaza.