Karl Rove y un consejo para Trump: "Iría (al debate) si fuese él"

El primer debate republicano está fechado para el 23 de agosto y Donald Trump, actual líder en las encuestas republicanas, todavía no confirmó presencia. Si bien Ronna McDaniel, presidenta del Comité Nacional Republicano (NRC), tiene esperanzas de que el expresidente aparezca en Milwaukee, las chances no están a su favor. Hasta el momento, Ron DeSantis, Nikki Haley, Tim Scott, Vivek Ramaswamy, Mike Pence, Chris Christie y Doug Burgum clasificaron a la primera cita entre los candidatos del GOP.

En este contexto apareció Karl Rove, famoso estratega republicano que acaparó la atención nacional durante el gobierno de George W. Bush, para comentar sobre el tan esperado debate. Asesor principal del presidente y subjefe de gabinete hasta agosto del 2007, habló con Fox News y le dejó un consejo al expresidente.

Si bien reconoció los peligros a los que Trump se expondría al subirse al escenario, ofrecerle una oportunidad evitable a sus rivales de escalar en las encuestas y poner en peligro su cómodo liderazgo, el exconsultor aseguró que es una buena instancia para reafirmar su liderazgo dentro del Partido Republicano.

"Pero yo me presentaría si fuera él, porque aquí es donde se llega a demostrar: 'Soy el líder y seguiré siendo el líder'. Si no se presenta, habrá gente que se dirá: '¿No nos lo dijo, no se burló de Joe Biden por no debatir y no ha dicho que era el mejor polemista del mundo?", explicó en la entrevista.

Rove nombró particularmente a Chris Christie como el candidato del que Trump más debería cuidarse, dado que su presencia en el escenario tendrá un único objetivo: atacarlo hasta hacerlo trastabillar. Además, dividió en dos a sus competidores, entre quienes buscarán atacarlo con dureza y quienes intentarán "moverse alrededor de él".

Otro de los motivos que mencionó para justificar la presencia del magnate en el debate fue su mochila judicial. Con el caso del Condado de Fulton en Georgia, Trump ya habría sido visto demasiadas veces entrando a un juzgado para una lectura de cargos, una imagen que por supuesto no es deseable para un candidato a presidente.

Por lo tanto, el republicano estima que el expresidente podría ayudar a renovar su imagen dentro de la cabeza de los potenciales votantes, especialmente de los republicanos moderados e independientes.

"Dependiendo de qué encuesta mires, una pluralidad o una mayoría de republicanos que dicen que si es condenado por algo en uno de estos juicios federales y uno de estos cuatro juicios, cuatro acusaciones, no van a votar por él. Así que tiene que encontrar la manera de calmar esas crecientes preocupaciones. Y la mejor manera de hacerlo es presentarse el 23 de agosto y el 27 de septiembre", sentenció.