La Administración Biden insiste en su "guerra" contra los electrodomésticos: el DOE publica nuevas reglas para los lavavajillas
El gobierno ha realizado varios esfuerzos para prohibir las estufas de gas y regular la eficiencia de otros aparatos.
Arrasar con las estufas de gas parece no ser suficiente para la Administración Biden. Ahora, también decidió poner en la mira a los lavavajillas como parte de su agenda en contra del cambio climático.
El Departamento de Energía (DOE) anunció nuevas reglas para reducir los límites de agua y energía que usan los lavavajillas, estableciendo un máximo de 3,2 galones de agua por ciclo y una disminución de electricidad de casi un 30% en su consumo.
La mayoría de los lavavajillas que se encuentran actualmente en el mercado usan alrededor de 3,5 galones por ciclo e incluso menos, lo que ya está muy por debajo del estándar federal de 5 galones. Sin embargo, las nuevas reglas limitarían a los fabricantes de electrodomésticos y los obligaría a cumplir con nuevos requisitos para motores eléctricos, lo cual podría reducir el rendimiento de los equipos.
Medidas contraproducentes
Aunque el DOE afirma que estas acciones buscan respaldar la agenda climática del presidente y que además ayudarían a ahorrarle dinero a los estadounidenses. La medida es criticada por lo contraproducente que puede llegar a resultar al minimizar la eficiencia de los electrodomésticos.
Donald Trump explicó que este tipo de medidas obligaría a que las personas usen repetidamente el lavavajillas para obtener los mismos resultados que se obtenían con un solo uso.
La “guerra” de Biden contra los electrodomésticos
Las nuevas restricciones formarían parte de varios esfuerzos que ha realizado la Administración Biden en contra de lavadoras, refrigeradoras y estufas de gas.
En el primer día como presidente en enero de 2021, Biden firmó una orden ejecutiva pidiendo hacer “revisiones importantes” a los estándares actuales de regulación de electrodomésticos y poco tiempo después anunció que se enfocaría en más de una docena de reglas de eficiencia de productos como calentadores de agua, productos de cocina, entre otros.
El año pasado, el gobierno se jactó de haber tomado medidas contra 110 electrodomésticos, y uno de los esfuerzos más polémicos ha sido en contra de las estufas de gas.
El DOE ya propuso una regla este año que podría sacar del mercado muchas de las cocinas de gas. De hecho, según la propia secretaria de Energía, Jennifer Granholm, la propuesta afectaría a aproximadamente la mitad de las estufas que están actualmente en el mercado.
Los republicanos del Congreso han intentado bloquear cualquier norma que restringa o prohíba este tipo de aparatos, pero los demócratas insisten en acabar con esta opción. Recientemente Nueva York se convirtió en el primer estado del país en prohibir las estufas de gas, y en otras localidades de Massachusetts, San Francisco y Berkley se han tomado decisiones para obligar a los ciudadanos a usar alternativas como la inducción o la placa eléctrica.