Subida de precios, despidos y éxodo: la ley del salario mínimo sacude la industria de la comida rápida en California
Burger King, McDonald 's, Rubio's y Blaze Pizza son algunos de los restaurantes que han tomado medidas para hacer frente al repentino aumento de sus costos.
Blaze Pizza nació y creció en California. Elise y Rick Wetzel abrieron en 2012 el primer local cerca del campus de UC Irvine. Dos meses después, apareció el segundo, en Pasadena. Allí radicaron, también, su sede central. Más de una década después, esto está por cambiar.
La "pizzería estilo Subway", como la describió un periódico local el año de su lanzamiento, se convirtió en una de las cadenas de comida rápida que más velozmente crecía. El año pasado registró 295 restaurantes en todo el país, según Technomic, 93 de ellos en su estado natal. Entre sus inversores, y portavoces, LeBron James ayudó a levantar el perfil de la pizzería.
Este mes, el CEO de la empresa, Beto Guajardo, anunció que la sede central de Blaze Pizza se mudará a Atlanta, Georgia. La mudanza "nos ayudará a impulsar nuestra próxima ola de crecimiento", explicó Guajardo en una declaración recogida por Restaurant Business.
Para septiembre esperan haber trasladado sus operaciones de desarrollo empresarial, marketing, finanzas y recursos humanos, entre otros departamentos. El CMO Christian Kuhn aseguró, en conversación con el mismo medio especializado, que Georgia -donde sólo tienen cinco restaurantes- es más asequible para vivir y que abunda el talento en la industria alimenticia.
Afirmó, sin embargo, que no abandonarán el Golden State y que a pesar de los malos resultados el año pasado a nivel nacional "no vamos a cerrar tiendas".
Ninguno de los dos ofreció más explicaciones. LeBron James tampoco ofreció detalles.
La decisión de Blaze Pizza se une así a una serie de golpes a la industria de comida rápida en The Golden State.
En abril entró en vigor una ley que estableció el salario mínimo para empleados de las cadenas de comida rápida en 20 dólares la hora, subiéndolo del promedio de poco más de 16 dólares en 2022. Uno de los salarios mínimos más altos del país.
'In memoriam'
Burger King, McDonald 's, El Pollo Loco, Fosters Freeze... son algunas de las "víctimas del salario mínimo de Newsom", según un anuncio a toda página publicado por la California Business and Industry Alliance (CABIA) en la edición estatal impresa de USA Today.
"Las subidas salariales sin precedentes tienen consecuencias sin precedentes, especialmente en California, donde las circunstancias ya están en contra de las empresas", dijo el presidente de la fundación, Tom Manzo, en un comunicado.
California "merece algo mejor", aseguró Manzano, que además apuntó directamente contra el gobernador:
La CABIA remarcó en su campaña que entre el otoño y enero, la ley se firmó en septiembre, los restaurantes de comida rápida recortaron unos 9.500 puestos de trabajo. Una disminución del 1,3% con respecto a septiembre de 2023.
Subida de precios y despidos
"Los empresarios de comida rápida tienen pocas alternativas a un salario mínimo de 20 dólares, aparte de recortar sus plantillas o subir los precios, ya que los márgenes de beneficio de la comida rápida son escasos, con una media del 5-8 por ciento", aseguró Lee Ohanian, del Hoover Institution en la Universidad de Stanford.
Ohanian también señaló que la ley fue empujada por los sindicatos, describiéndola como el producto de un acuerdo entre sindicalistas y legisladores, con algunos "feos" resultados:
Manzano también que los empleadores tienen poca alternativa más que subir los precios, pero aquel era un remache limitado: "La gente no va a pagar 20 dólares por un Big Mac. No va a pasar".
Tan sólo unos días después de la entrada en vigor de la norma se un aumento de los precios entre los 25 centavos y los 4 dólares. En Burger King, por ejemplo, el Texas Double Whopper pasó de costar $15,09 el 29 de marzo a $16,89 el 1 de abril.
Otras consecuencias fueron más dramáticas: la cadena de restaurantes Rubio's Coastal Grill que iba a cerrar 48 locales en California tras el aumento del salario mínimo. Representan cerca de un tercio del total de sus instalaciones en The Golden State, Nevada y Arizona.
Newsom se defiende
El gobernador y sus voceros han defendido la medida, argumentando que la pérdida de empleos es mentira. Más allá de las críticas por los efectos de la norma, Newsom recibió reproches cuando una empresa que fundó, The PlumpJack, publicó una búsqueda laboral para un busser por un salario de $16 la hora.
Aunque la búsqueda de PlumpJack Cafe ha terminado, sigue disponible en ZipRecruiter:
Ohanian, del Hoover Institution, matizó que mientras que el mandatario demócrata no sigue gestionando la empresa, "a muchos les sigue pareciendo de mal gusto que el espíritu de la legislación de la que está tan orgulloso no sea seguido por su empresa familiar".
El analista añade que la oferta de 16 dólares la hora evidencia el precio real de mercado. El restaurante, dice, no paga más porque no necesita. "El puesto de trabajo se cubrirá en el restaurante de Newsom, y quizá ya se haya cubierto", añadió.
"Pero hay más de 9.500 empleos en California que ya no existen porque no pueden pagar lo que paga el restaurante de Newsom. Y eso es lo más triste de esta nueva y fea ley".