Milei y Massa intercambiaron golpes en el último debate presidencial de Argentina: "Si fueras Pinocho, ya me hubieras lastimado un ojo"

El peronista y el libertario se vieron las caras por última vez antes de la segunda vuelta del 19 de noviembre.

A días de la segunda vuelta que definirá al próximo presidente de Argentina, los candidatos Javier Milei y Sergio Massa se midieron en el último debate electoral. El libertario y el peronista se sacaron chispas desde la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, desde dónde cada uno intentó convencer a los votantes que de elegirlo el próximo domingo 19 de noviembre.

Luego de las elecciones generales de octubre, Massa, actual ministro de Economía, resultó el candidato más votado con el 36 % de los votos, siete puntos por delante de Milei, quien cosechó el 29 % de los votos. Como ninguno cumplió los requisitos necesarios para ganar en primera vuelta, ambos avanzaron hacia el balotaje del 19 de noviembre, donde quien consiga más votos que el otro se convertirá en el próximo presidente del país sudamericano.

El debate, que duró casi dos horas, vio a Massa con la clara estrategia de dejar a su rival como alguien no calificado por ocupar la presidencia y de maximizar la denominada “campaña del miedo” contra las propuestas del libertario.

Contrario a lo que se podía pensar de antemano, Milei se vio más a la defensiva, teniendo que aclarar sus posiciones sobre algunos temas, aunque no desaprovechó las oportunidades de castigar la gestión del Gobierno del cual su rival forma parte.

Economía

Los candidatos comenzaron hablaron de economía, tema en el que el peronista acusó a su rival de querer eliminar los subsidios, de subir los costos de vida y plasmó su estrategia con una serie de preguntas por sí o por no.

Además, atacó la dolarización de Milei, propuesta que calificó como “una apropiación de los ahorros" e insistió en que él es el más presidenciable de los dos candidatos. El ministro logró hablar lo menos posible de su gestión, y, como localmente se dice, "pasarle la pelota" a su rival.

Milei, quien se presentó como un “economista matemático especializado en crecimiento”, remarcó que Argentina lleva "100 años de decadencia".  Habló de pobreza, inflación y se mostró en contra del "modelo de la casta", según él encarnado por el peronista. Mencionó al pasar los datos macroeconómicos desde que Massa llegó al Gobierno en 2022, lo que resumió en la siguiente frase: “Mirá la miseria que generaste”.

El economista insistió con su idea de cerrar el banco central para "eliminar el cáncer de la inflación" y, cuando su oponente intentó resaltar sus características agresivas a la hora de debatir, aseguró “expresar con pasión la indignación que genera tener un gobierno que nos arruina a todos”.

"Eso de estar fraccionando videitos para generar mentiras... entiendo que te funcione la campaña del miedo, pero dejá de mentirle a la gente. (...) Si fueras Pinocho ya me hubieras lastimado un ojo", sentenció.

Relaciones internacionales

Este bloque terminó desarrollándose de forma casi exclusiva sobre las relaciones con el Vaticano, la situación de las Islas Malvinas y las relaciones comerciales.

En cuanto al primer punto, Massa, destacó la función del Papa Francisco, se comprometió a trabajar para que visite el país en 2024 y recordó los dichos de Alberto Benegas Lynch (h), un referente de Milei, quien sugirió que se deberían "suspender las relaciones con el Vaticano". Sobre Malvinas, acusó a Milei de no importarle la lucha por la soberanía, primero por sus elogios a Margaret Thatcher, a quien el peronista definió como una "enemiga" del país, y luego por sus dichos sobre la voluntad de los isleños.

Sobre el comercio, dijo que iba a negociar con todos los países, contrastando con la propuesta de Milei que mira de reojo a China y a Brasil. "Por eso la gente te tiene miedo", continuó Massa.

Milei confesó que le hizo llegar sus disculpas al Papa Francisco luego de los mencionados comentarios y reconoció que tendría intenciones de recibirlo con "todos los honores" que se merece. En cuanto a las relaciones comerciales, habló de relaciones muy cercanos con Estados Unidos, Israel y Occidente, lo que coincidiría con una Argentina abierta al comercio internacional e integrada al mundo.

Salud y educación

Nuevamente, Massa buscó generar miedo en torno a Milei y le consultó en reiteradas ocasiones qué iba a hacer con las universidades y escuelas públicas. “Frente a la campaña de mentiras a las que hemos sido sometidos, quiero aclarar que la salud y la educación van a seguir siendo públicas. Argentina es un país federal, por lo tanto no es decisión del Ejecutivo si es o no publica porque depende de las provincias”, respondió el libertario.

No contento con esta respuesta, el ministro de Economía miró directo a la cámara y le dijo a los votantes que "este señor va a arancelar la universidad".

Producción y trabajo

El peronista afirmó que piensa ser el "presidente del trabajo", encaminándose hacia 2 millones de nuevos puestos de trabajo, algo que pareció muy serio a Milei.

"Me resulta simpático que el ministro Massa hable de crear 2 millones de puestos de trabajo. La cantidad de empleados en el sector privado está estancado desde 2011, como el nivel de producción", disparó el libertario.

Además, Milei prometió reducir la cantidad de ministerios y crear uno de Capital Humano, con el que pretende impulsar su agenda productiva. Habló de bajar impuestos y reducir inflación.

Los argentinos tienen que elegir a quien tenga la templanza, la capacidad, el equilibrio mental y el contacto con la realidad", retrucó el exdiputado nacional.

Seguridad

Quizás en el único punto en el que ambos candidatos se coincidieron en el diagnóstico, se comprometieron a combatir el crimen y la inseguridad en Argentina. Milei se refirió a la Argentina como un "baño de sangre", producto de que se ve al "delincuente como una víctima", por lo que impulsará una política de "el que las hace las paga".

Propuso tomar el ejemplo de la Ciudad Nueva York y habló de la gestión de Rudy Giuliani, para luego describir la actividad delictiva en Argentina como una "muy rentable", dado el bajo porcentaje de condenas.

Massa se apoyó en su gestión como intendente de Tigre, la cual fue elogiada por el propio Giuliani, y habló de la tecnología aplicada para bajar los delitos, por lo que espera poder trabajar con los gobernadores para aplicarlo en el resto del país.

Si bien Milei reconoció la gestión de su rival en Tigre como "buena" en materia de seguridad, habló de reformar el Código Penal y el sistema carcelario.

Convivencia democrática y derechos humanos

Tras una primera exposición de Massa, Milei le recordó el historial del peronismo cuando no le toca estar en el poder. "Me resulta graciosos escucharlo a Sergio hablar de convivencia democrática. Pensar que pertenece a un espacio que le hizo 14 paros a Alfonsín, que lo sacó a patadas a De la Rúa para voltear la convertibilidad, que han hecho de la democracia una democracia fallida", retrucó.

"Con esa lógica perversa durante el kirchnerismo estuvimos al borde de una guerra civil con las 125, o los desmadres que hicieron con el memorándum con Irán, con lo que tiene que ver con la muerte de Nisman a poco de declarar contra la jefa de tu espacio, tu jefa”, añadió, haciendo referencia a Cristina Kirchner.

"¿Por qué querés ser presidente?"

Esa fue la última consigna de la noche, en la que ambos candidatos pudieron argumentar qué los motiva a llegar a la Casa Rosada. El primer turno fue para el actual ministro de Economía, quien primero recordó sus orígenes para luego explicar más en detalle su agenda.

“Quiero ser Presidente para que nuestros trabajadores recuperen ingreso, para que nuestras PYMES ganen mercado en el mundo, para que nuestros pibes sigan yendo a la universidad pública, pero sobre todas las cosas para que nuestras mamás y mujeres puedan entrar al mercado de trabajo sin miedo y sin discriminación. Quiero ser Presidente porque tengo hijos a los que les quiero dejar un país mucho mejor que el que me tocó vivir a mí. Y quiero ser presidente para superar esta crisis que nos ha tocado vivir a los argentinos. Entendiendo que viene el momento del crecimiento”, comenzó Massa.

“Argentinos, nos encontramos frente a la elección más importantes de los últimos 100 años. Muy especialmente en estos 40 años de la democracia que tenemos. Es el momento de preguntarnos si queremos seguir transitando en este sendero decadente que hace que cada día seamos más miserables, tengamos cada vez más pobres e indigentes, donde los chicos se tienen que ir de país a buscar un futuro, un país condenado a la miseria. Por eso te pido que al momento de evaluar tu voto te preguntes si preferís la inflación sobre la estabilidad, esta decadencia en producción y empleo o el crecimiento económico, si querés seguir sosteniendo a esta casta política, chorra, corrupta, parasitaria e inútil que lo único que hace es destruir nuestra generación de riqueza y hundirnos cada vez más. En el fondo te estoy preguntando si querés elegir entre el populismo que nos hunde y la república. (…) Quiero que tengas una luz de esperanza, existe una Argentina mejor, pero esa Argentina mejor solo es posible si es liberal”, sentenció Milei.