Los grandes fabricantes de automóviles dicen adiós a sus objetivos de vender únicamente vehículos eléctricos en 2030

Mercedes-Benz, Audi, Ford, GM y muchas otras compañías de la industria automotriz retractan sus objetivos de transición al mercado eléctrico debido a las pérdidas monetarias que genera.

Mercedes-Benz y Audi son hasta ahora los últimos grandes fabricantes de la industria automotriz que están dando marcha atrás a sus objetivos de vender únicamente vehículos eléctricos entre los años 2025 - 2030.

Tras una desaceleración generalizada en el crecimiento de las ventas de los carros eléctricos, muchas son las compañías que han decidido retractarse sobre la idea de fabricar y ofrecer sólo este tipo de automóviles para una fecha precisa.

Caso Mercedes, Audi y pérdidas millonarias de Ford

Hace tres años, Mercedes anunció su plan de lanzarse por completo en el mercado eléctrico para el año 2023. En ese momento, la compañía dijo que eliminaría todos los vehículos a gasolina, pero incluyó la advertencia de que sería "cuando los mercados lo permitieran" (aunque fijó la fecha en el año 2030). Sin embargo, la empresa informó en su última declaración de ganancias -del año pasado- que solo espera que el 50% de sus ventas sean totalmente eléctricas:

Los clientes y las condiciones del mercado marcarán el ritmo de la transformación (...) La empresa planea estar en condiciones de satisfacer las diferentes necesidades de los clientes, ya sea una transmisión totalmente eléctrica o un motor de combustión electrificado, hasta bien entrada la década de 2030.

Audi también retractó su postura sobre los vehículos eléctricos. El fabricante anunció que abandonó su objetivo de fabricar y ofrecer a la venta únicamente autos eléctricos para 2026. En lugar de eso, seguirán elaborando automóviles que funcionen con combustibles fósiles. 

En el caso de Ford, la fabricación de vehículos eléctricos (EV) le provocó un daño multimillonario. La empresa anunció unas pérdidas de 2.800 millones de dólares en agosto de 2023. Según indicó en su informe de resultados económicos de 2023, la multinacional con sede en Michigan contabilizó grandes pérdidas en el 2023. "Será una pérdida de alrededor de 4.500 millones de dólares para Ford Modele (modelo eléctrico), lo que refleja el entorno de precios, inversiones disciplinadas en nuevos productos y capacidad, y otros costos", dijo en un comunicado.

Sin embargo, estos fabricantes no han sido los únicos en ponerse este tipo de objetivos de transición a los vehículos eléctricos y desistir de ellos debido a pérdidas monetarias y poco crecimiento. Otros grandes como GM, Stellantis, Volvo, BMW, Toyota y Volkswagen hicieron anuncios similares y casi todos han dejado sus planes atrás o han reformado gran parte de ellos.

Los carros eléctricos son menos "fiables"

En los últimos años, se ha puesto en evidencia que los mercados y los conductores no confían en la eficacia del vehículo eléctrico. Una encuesta de Consumer Reports reflejó  que los carros eléctricos son menos "fiables" que aquellos con motores tradicionales de gasolina.

El sondeo reveló que los dueños de automóviles eléctricos reportaron un 79% más de problemas en sus carros que aquellos que funcionan con motor de gasolina (fabricados desde 2000 a 2023). La cifra aumenta hasta 146% más de problemas para los autos híbridos enchufables. Sin embargo, este tipo de automóvil pero en su modelo híbrido que no requiere carga tiene un 26% menos de problemas que la versión de combustión:

A medida que más vehículos eléctricos llegan al mercado y los fabricantes de automóviles construyen cada modelo en mayor número, estamos viendo que algunos de ellos tienen problemas con los motores del sistema de propulsión de los vehículos eléctricos, los sistemas de carga de los vehículos eléctricos y las baterías de los vehículos eléctricos.

Estos datos negativos se reflejan en la opinión de los conductores (que rechazan en su mayoría el uso de vehículos eléctricos). Un 63% de los estadounidenses aseguró que no compraría un auto eléctrico, según un sondeo del Pew Research Center. La mitad de los adultos expuso que no considerará o es poco probable que considere comprar un automóvil eléctrico en el futuro. Otro 13% afirmó, directamente, que no planea adquirirlo.

Otro sondeo puso en evidencia que los primeros seis meses de este año, las ventas de vehículos eléctricos sólo se incrementaron un 49% en todo el mundo (respecto al aumento del 63% del 2022). En el país, a pesar de la apuesta de la Administración Biden por los carros eléctricos, sólo un 28% de los estadounidenses los considera útiles.

Las compañías de alquiler también sufren pérdidas

La compañía de alquiler de carros Hertz anunció en enero que pondría en venta alrededor de 20.000 vehículos eléctricos de los que disponía su filial en Estados Unidos. Entre ellos se cuentan modelos de Tesla y de otros productores. La compañía, que en 2022 había previsto remodelar su flota de automóviles hacia el eléctrico da así media vuelta a esta medida.

De acuerdo con Reuters, la razón alegada para acabar con la flotilla de vehículos eléctricos es el alto coste derivado de choques y pequeños accidentes, que desajusta las cuentas de la empresa. Hertz decide así optar por mantener sus vehículos tradicionales de combustible fósil, así como los híbridos. Hertz había previsto adquirir 100.000 unidades de Tesla, junto con otras 65.000 unidades de Polestar, productor sueco adquirido en 2025 por el grupo Volvo. La decisión de la junta directiva surge después de que las acciones de Hertz cayeran un 4%. 

Otra compañía de renting, la alemana Sixt, también se estaría deshaciendo sus vehículos eléctricos. En diciembre de 2023, se supo que la compañía no había vuelto a comprar unidades de Tesla desde 2022. De acuerdo con Reuters, Sixt está vendiendo modelos como parte de su programa de cambio de flotilla.