Joe Biden pide una "pausa" en la guerra entre Israel y Hamás y anuncia una estrategia nacional contra la "islamofobia"

El presidente equipara los delitos de odio contra los musulmanes al antisemitismo, sin mencionar el incremento del acoso y amenazas contra la comunidad judía en el país.

El presidente Joe Biden pidió en las últimas horas una "pausa" en la guerra que Israel libra contra el terrorismo de Hamás tras los brutales atentados del pasado 7 de octubre. Además, la Casa Blanca anunció una estrategia nacional contra la "islamofobia" equiparando el odio contra los musulmanes con el antisemitismo sin mencionar el incremento del acoso y amenazas contra la comunidad judía en el país.

Biden: "Creo que necesitamos una pausa"

Durante la celebración de un discurso de campaña en Minneapolis, uno de los asistentes al acto instó a Biden a a pedir un alto el fuego. En ese momento, el presidente señaló: "Creo que necesitamos una pausa", diciendo que este parón temporal permitiría la salida de los rehenes.

Las declaraciones de Biden llegan en un momento de negociaciones para liberar a los todavía 242 rehenes capturados por el grupo terrorista Hamás el 7 de octubre tras el ataque sin precedentes contra Israel.

La primera "estrategia nacional" contra la Islamofobia

Por otro lado, pese a la masacre de Hamás en Israel y los continuos actos de antisemitismo vividos durante el último mes en Estados Unidos, la Administración Biden parece más preocupada por proteger al Islam. Así se desprende del comunicado emitido por la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, en el que anunciaba el lanzamiento "de la primera estrategia nacional contra la Islamofobia".

Durante demasiado tiempo, los musulmanes de Estados Unidos, y quienes son percibidos como musulmanes, como los árabes y los sijs, han soportado un número desproporcionado de ataques alimentados por el odio y otros incidentes discriminatorios. Todos lloramos el reciente asesinato bárbaro de Wadea Al-Fayoume, un niño palestino estadounidense musulmán de 6 años, y el brutal ataque a su madre en su casa a las afueras de Chicago.

"En Estados Unidos no hay lugar para el odio contra nadie. Y punto"

Por ello, en consonancia al objetivo del presidente Biden cuando "se presentó a las elecciones", que era "restaurar el alma de nuestra nación", quiso dejar claro claro que "en Estados Unidos no hay lugar para el odio contra nadie. Y punto".  En el comunicado, el líder del Ejecutivo y la Vicepresidenta Kamala Harris señalan que trabajarán con "líderes comunitarios, defensores, miembros del Congreso, y más para desarrollar la estrategia - que será un esfuerzo conjunto dirigido por el Consejo de Política Interior y el Consejo de Seguridad Nacional - y contrarrestar el flagelo de la islamofobia y el odio en todas sus formas".

Para justificar la necesidad de esta iniciativa, la Casa Blanca volvió a equiparar la "islamofobia" con el antisemitismo, sin hacer ninguna referencia a las manifestaciones de odio y acoso que están sufriendo las comunidades judías en el país desde la masacre de civiles israelíes el pasado 7 de octubre.

El anuncio de hoy es el último paso en el marco de la directiva del Presidente Biden del año pasado de establecer un grupo interinstitucional para aumentar y coordinar mejor los esfuerzos del Gobierno de EE.UU. para contrarrestar la islamofobia, el antisemitismo y las formas conexas de prejuicio y discriminación dentro de los Estados Unidos. De cara al futuro, el Presidente, la Vicepresidenta y toda nuestra Administración seguirán trabajando para garantizar que todos los estadounidenses tengan la libertad de vivir sus vidas con seguridad y sin temor por cómo rezan, en qué creen y quiénes son.