Chip Roy presentó un proyecto de ley para evitar la persecución anticristiana de Biden-Harris

El representante republicano por Texas, Chip Roy, presentó un proyecto de ley para revocar la FACE Act y terminar con la persecución anticristiana de la Administración Biden-Harris. El legislador conservador volvió a esgrimir los datos de cristianos encarcelados por esta norma y este Ejecutivo y contó la historia de Eva Edl, una activista provida de 89 años, superviviente de un campo de concentración en su infancia, que ha sido condenada a 11 años de prisión por participar en protestas contra el aborto en Michigan.

El mensaje de Roy en su cuenta de X es demoledor: "Una mujer que escapó valientemente de un campo de exterminio cuando era niña se enfrenta ahora a la muerte en prisión en Estados Unidos por defender la santidad de la vida". 

"Detener esta creciente instrumentalización e intimidación"

El propio Roy se hizo eco de la historia de Edl en un artículo en el Daily Wire, en el que explicaba que hechos como lo ocurrido con ella y con otros activistas cristianos, le han llevado a dar el paso "para detener esta creciente instrumentalización e intimidación". El legislador texano apuntó que "el Congreso debe poner fin a este acoso selectivo y garantizar la derogación de la Ley FACE. Permitir que permanezca significa permitir que los burócratas de los más altos niveles del gobierno apliquen la ley de manera desigual, tomen represalias injustificadas contra los estadounidenses provida y protejan a la industria radical del aborto". 

"Eva Edl tenía sólo nueve años cuando fue enviada a un campo de prisioneros húngaro por los comunistas al final de la Segunda Guerra Mundial. Tras pasar 18 meses en condiciones infernales, Edl y su familia lograron huir del campo y emigraron a Estados Unidos. A sus 89 años, Eva es una de las muchas estadounidenses provida que se enfrentan a la ira del Departamento de Justicia de Biden-Harris, que ha convertido en un arma la Ley de Libertad de Acceso a las Clínicas (FACE). Edl y otros seis acusados esperan actualmente una sentencia federal por su participación en protestas en clínicas abortistas de Michigan".

Roy recuerda que, pese a que la norma entró en vigor en 1994, ha sido esta Administración quien la ha convertido en un arma contra los cristianos: "la Ley FACE se ha convertido en una de las herramientas favoritas de la administración Biden-Harris para atacar al movimiento provida. La administración la ha utilizado de forma desproporcionada en casos de protesta pacífica y cotidiana de estadounidenses contra el aborto, al tiempo que ha hecho la vista gorda ante cientos de ataques violentos registrados contra centros de recursos para embarazadas e iglesias tras la filtración de la sentencia del caso Dobbs contra la Organización de Salud de la Mujer de Jackson".

El 92% de los acusados por la FACE Act con Biden-Harris son manifestantes provida

La oficina del propio Roy consiguió finalmente que el Departamento de Justicia le facilitase los datos de detenciones por vulnerar esta ley, y el resultado fue aterrador: "El Departamento de Justicia Biden-Harris había imputado 24 casos de la Ley FACE contra 55 acusados. Sólo dos de estos casos se presentaron en defensa de centros de recursos para embarazadas y nunca para la protección de un lugar de culto. Esto significa que casi el 92% de todos los casos de la Ley FACE de Biden-Harris se presentaron contra manifestantes provida, a pesar de que más de 285 iglesias y 94 centros de recursos para el embarazo y grupos provida han sido atacados y vandalizados desde mayo de 2022".

Estos números indican que una de cada cuatro personas de las 211 personas procesadas bajo la FACE Act lo han sido durante el mandato Biden-Harris. Además, los actuales gobernantes han dado un giro de tuerca a la legislación que aumenta las penas a los condenados: "Por primera vez en la historia de Estados Unidos, esta Administración empezó a añadir cargos de delito grave de 'conspiración contra los derechos' a los cargos de la Ley FACE, que conllevan penas de prisión de más de 10 años. El uso indebido de esta ley de la época de la reconstrucción supuso una escalada dramática contra los estadounidenses provida en comparación con administraciones anteriores".

De nuevo, el caso de Edl sirvió al congresista para ilustrar la situación: "Debido a este cargo adicional de conspiración, Edl, que fue condenada recientemente a tres años de libertad condicional en un tribunal de Tennessee, se enfrenta ahora a hasta 11 años de prisión federal y 350.000 dólares de multa, lo que significa que una mujer que escapó valientemente de un campo de exterminio cuando era una niña se enfrenta ahora a la muerte en prisión en Estados Unidos por defender la inviolabilidad de la vida".