Primer día del DNC: discursos controversiales, confirmación de Walz como candidato a VP y críticas a Biden por hablar fuera del horario estelar

El primer día de la Convención Nacional Demócrata (DNC) estuvo lleno de polémica y complicaciones. La confirmación de Tim Walz como compañero de fórmula de Kamala Harris quedó completamente eclipsada en una jornada mayormente marcada por los disturbios anti-Israel y el inexplicable retraso del discurso de Joe Biden, quien habló fuera del horario estelar de Estados Unidos, subiendo al escenario a las 23:25 ET.

“En este momento, la Convención Nacional Demócrata está muy retrasada. Existe un mundo en el que gran parte de Estados Unidos estará en la cama cuando el presidente Joe Biden suba al escenario”, escribió Josh Dawsey, periodista del Washington Post, una hora antes de que Biden hablara.

"Es inconcebible que el discurso del presidente Biden se produzca a la medianoche, hora del Este de Estados Unidos", dijo Christopher Hale, delegado demócrata de Tennessee en 2020. "Deberíamos posponer algunas reuniones futuras y poner al presidente allí pronto".

Las críticas también llegaron por parte de periodistas indignados por el retraso de Biden y el cronograma de discursos de figuras relativamente secundarias o intrascendentes que subieron al escenario para destacar a Kamala Harris, a Walz y el “patriotismo” del propio Biden por dar un paso al costado y respaldar a su vicepresidente en la carrera presidencial.

De hecho, varias de las alocuciones cortas que precedieron a la de Biden se volvieron repetitivas, dedicadas mayormente a elogiar al presidente como el “líder experimentado” del partido, a menudo con frases como “te queremos, Joe”.

“¿Hasta qué hora van a hacer esperar los demócratas a Joe Biden para hablar? Quedan muchos oradores, si los mantienen a todos en la lista”, dijo en Twitter después de las 22:30 ET el corresponsal político jefe del Washington Examiner, Byron York.

La primera dama, Jill Biden, apenas empezó a hablar pasadas las 23:10 ET y no duró ni diez minutos en el escenario. Posteriormente, Ashley Biden subió al escenario para darle el lugar a su padre, quien fue recibido con una gran ovación por parte del público.

Biden arrancó su discurso, como la mayoría de los oradores de la jornada, repitiendo el eslogan de que los demócratas deben preservar la democracia y recordó las circunstancias de cómo asumió la Presidencia en 2021.

“Sabía entonces, desde el fondo de mi corazón, como lo sé ahora, que no hay lugar en Estados Unidos para la violencia política, ninguno”, dijo Biden. “No se puede decir que se ama a un país solo cuando se gana”.

“La democracia ha prevalecido, la democracia ha cumplido y ahora la democracia debe preservarse”, continuó el presidente, quien abandonó la carrera luego de que los líderes del partido, los medios progresistas y los grandes donantes del partido lo obligaran a dar un paso al costado luego de su desastroso desempeño en las encuestas.

“Nos enfrentamos a un punto de inflexión, uno de esos raros momentos en la historia en los que las decisiones que tomemos ahora determinarán el mundo durante las próximas décadas”, dijo Biden, quien intentó mostrarse enérgico a lo largo de su discurso, alzando el timbre de voz durante varios momentos y atacando en repetidas ocasiones al expresidente Donald Trump, a quien tildó de "dictador".

El presidente también usó parte de su discurso para destacar su historial y darle mérito a Harris en los “éxitos” de su gestión.

De hecho, Biden calificó a su propio mandato como “uno de los cuatro años de progreso más extraordinarios de la historia”, destacando la recuperación de la pandemia, el crecimiento económico y sus medidas que buscaban reducir los precios de los medicamentos. Sin embargo, el presidente ignoró el impacto de la inflación, algo reconocido públicamente por la propia Harris, los recientes números negativos sobre el desempleo que alteraron los mercados, la crisis en la frontera o los problemas de inseguridad. También dijo que él y Harris ayudaron a que las escuelas abrieran después de la pandemia, un comentario que provocó indignación en redes sociales. 

En otro momento, Biden ignoró por completo la crisis fronteriza y destacó que ahora hay "menos cruces fronterizos" que cuando Trump dejó el cargo.

A pesar de que el discurso de Biden en el primer día de la DNC se consideraba un paso importante para los demócratas, visto como una suerte de paso de antorcha después de que el presidente abandonara la carrera y respaldara a Harris como su reemplazo, la realidad es que muchos estadounidenses no pudieron escuchar en vivo al presidente.

Incluso, algunos miembros del público de la DNC abandonaron el recinto antes de que Biden hablara.

“¿Qué tan tarde será el discurso del presidente Joe Biden? A medida que se acercan las 11 p. m. en Chicago, multitudes de personas abandonan el área del estadio, muchas de ellas con carteles que dicen que aman a Joe, y se dirigen hacia la noche”, informó Dawsey, del WaPo.

Disturbios anti-Israel

Sin embargo, más allá de las críticas a Biden, la Convención Nacional Demócrata vio temprano cómo las protestas anti-Israel causaron revuelo y preocupación, con enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los alborotadores que protestaban contra Benjamín Netanyahu y los demócratas que están apoyando al Estado israelí.

De hecho, el temor ante los manifestantes fue tal que, incluso, la ciudad de Chicago se preparó para recibir a los alborotadores, con comerciantes vallando sus tiendas y un refuerzo en el número de agentes del orden para preservar la seguridad en las inmediaciones del United Center.

A pesar del refuerzo de la seguridad, cientos de manifestantes se acercaron al recinto con banderas palestinas, carteles y cánticos antisemitas.

La situación se volvió especialmente compleja cuando los más violentos comenzaron a arrojar objetos contra el vallado instalado por las autoridades. Con el correr de los minutos, los alborotadores lograron derribar al menos tres paneles de la valla perimetral exterior de 10 pies. Esto generó enfrentamientos entre los manifestantes y la Policía y también algunos pocos arrestos para controlar la situación.

Durante su discurso, el presidente Biden dirigió algunas de sus palabras estos manifestantes que amenazaban a la seguridad del evento. "Esos, esos manifestantes en la calle, tienen un punto", dijo Biden al público demócrata. 

"Mucha gente inocente está siendo asesinada en ambos bandos", añadió. Biden aseguró después que su Administración ha trabajado por la paz en Oriente Medio, subrayando que el secretario de Estado, Antony Blinken, se encontraba en esos mismos momentos en Israel para defender los diálogos de tregua con Hamás.

Algunos discursos polémicos y divisivos

Si bien a lo largo de la jornada hubo muchos mensajes moderados, la jornada tuvo momentos polémicos y potencialmente divisivos.

Por ejemplo, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton sonrió y asintió mientras el público de la Convención Nacional Demócrata estallaba en cánticos de “¡enciérrenlo!”, en una clara referencia al expresidente Donald Trump.

“Como fiscal, Kamala encarceló a asesinos y narcotraficantes, nunca descansará en defensa de nuestra libertad y seguridad. Donald Trump se durmió en su propio juicio, y cuando despertó hizo su propia historia, la primera persona en postularse a la presidencia con 34 condenas por delitos graves”, dijo Clinton.

Asimismo, el representante de Maryland Jamie Raskin afirmó durante su alocución que los demócratas tienen que “defender la democracia” y acabar con el "culto a la personalidad" del Partido Republicano.

"Alguien debería haberle dicho a Donald Trump que el trabajo del presidente según el Artículo II de la Constitución es encargarse de que las leyes se ejecuten fielmente, no de que se ejecute al vicepresidente", dijo Raskin, que inmediatamente afirmó en tono de broma que los manifestantes del 6 de Enero trataron de “matar” al exvicepresidente Mike Pence.

"JD Vance, ¿entiendes por qué de repente se abrió una vacante para un compañero de fórmula en la fórmula del Partido Republicano? (…) Intentaron matar a tu predecesor", dijo.