Newsom endurece las penas por robo y saqueo... para evitar una propuesta que las endurecería aún más
Los demócratas de California se encuentran en campaña contra la Proposición 36, un paquete de medidas de seguridad que se someterán a un referéndum en noviembre.
Horas después de que el gobernador Gavin Newsom rubricara un paquete legislativo contra delitos como robos y saqueos, dos 7-Eleven en Hollywood eran saqueados y vandalizados por veinteañeros en bicicleta. Entre un robo y otro pasaron veinte minutos. Es el tercero en ocho días para la cadena minorista:
🤯 A huge mob of teens on bikes raided a 7-Eleven in Los Angeles pic.twitter.com/NkwF4YAqQh
— Insider News (@Ins1der_News) August 12, 2024
La nueva legislación, aprobada con apoyo bipartidista, tiene este tipo de delitos llamados "smash-and-grab" como uno de sus principales objetivos. Según Newsom, es la normativa "más importante en materia de delitos contra la propiedad en la historia moderna de California". Analistas y críticos, sin embargo, señalan que no es más que una cortina de humo para restar atractivo a la Proposición 36: un paquete de medidas de seguridad que será sometido a votación en noviembre.
"Son medidas a medias, que no abordan las cuestiones fundamentales de la reincidencia habitual en el robo, la epidemia de fentanilo y la actual crisis de las personas sin hogar", aseguraron desde la campaña Yes on Proposition 36 apenas se aprobó el proyecto. "Los líderes del Estado han tenido años para hacer frente a la delincuencia de California y las crisis de drogas, sin embargo, poco se ha hecho para abordar las causas fundamentales".
"El objetivo principal de estos proyectos de ley es tratar de convencer a la gente de no votar por la Proposición 36", dijo John Shu, jurista radicado en el Estado Dorado a The Washington Examiner. "No es porque el gobernador Newsom realmente quiera hacer algo sobre la alta criminalidad".
Nuevas medidas de seguridad antes de las elecciones reducirían el atractivo de otras medidas con el mismo propósito, iría, según Shu, el razonamiento del mandatario. Sin embargo, opinó el experto, ambas pueden funcionar juntas para reducir la criminalidad.
Los demócratas del estado, Newsom incluido, intentaron evitar que la Proposición 36 llegase a las papeletas. Malogrado este esfuerzo, el gobernador comenzó a hacer campaña para evitar que alcance una mayoría de votos de la ciudadanía: el viernes dijo que devolvería al estado a la década del 80, la guerra de las drogas, y que llevaría a "encarcelamientos masivos".
Una reciente encuesta de Berkeley IGS Poll, sin embargo, asegura que el 56% de los californianos apoyan la iniciativa.
"La Propuesta 36 es la solución integral y compasiva que California necesita", sostienen desde la campaña a favor de la medida. "Aborda directamente estos desafíos con fuertes incentivos para el tratamiento de drogas, lo que reducirá la falta de vivienda y proporcionará a nuestras comunidades y pequeñas empresas la responsabilidad y las consecuencias necesarias para frenar a los reincidentes".
La propuesta busca revisar parte de otra -Proposición 47- aprobada hace una década que rebajó penas con la intención de reducir la población penitenciaria. Prometía, además, ofrecer rehabilitación a los delincuentes no violentos.
"La Proposición 36 cuenta con un fuerte apoyo bipartidista por esta simple razón: es el verdadero cambio que California necesita", aseguran en Yes on Proposition 36. En noviembre se sabrá si la mayoría de los californianos están de acuerdo.