El Servicio Postal de los Estados Unidos (USPS) aumentó el pasado domingo el precio de las estampillas. A modo de respuesta para controlar los efectos de una alta inflación, el costo individual pasó de 63 a 66 centavos de dólar. El incremento se había anunciado en el mes de abril mediante un comunicado en el que se acentuaba que la causa no era otra que lograr la estabilidad financiera.
"A medida que los gastos de funcionamiento alimentados por la inflación siguen aumentando y los efectos de un modelo de fijación de precios previamente defectuoso todavía se hacen sentir, estos ajustes de precios son necesarios para proporcionar al Servicio Postal los ingresos tan necesarios para lograr la estabilidad financiera buscada por su plan de 10 años Delivering for America", indicó el USPS en la mencionada misiva publicada en abril.
Además, el precio por enviar una carta con contador pasó de 60 a 63 centavos, al mismo tiempo que el precio de enviar tarjetas postales se elevó de 48 a 51 centavos. Por su parte, el envío tanto de postales como de cartas internacionales se incrementó de 1,45 a 1,50 dólares por unidad.
Desde el 2019, y como parte de un esfuerzo para aumentar los ingresos debido al decadente volumen del correo en general, el USPS subió los precios de los sellos un 32 % . Por ejemplo, en 2022 el volumen cayó a su nivel más bajo en 50 años y desde el 2006 se redujo un 50 %.
En cuanto a la situación financiera del organismo federal, viene registrando perdidas netas de más de 90.000 millones desde el 2007. Según informó Fox News, Joe Biden firmó una ley que garantizó unos 50.000 millones de dólares al USPS como parte de un alivio financiero durante la próxima década.
En adición, el Congreso le perdonó al Servicio Postal un préstamo Covid-19 de 10.000 millones realizado en 2020, además de concederle 3.000 millones de dólares el año pasado para financiar la compra de vehículos eléctricos y la infraestructura de recarga.
