Una investigación periodística denuncia "tráfico humano" en las bases militares del Golfo Pérsico

'The Washington Post', la NBC y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación destapan un caso que afecta a miles de trabajadores inmigrantes.

Miles de trabajadores inmigrantes en bases militares en el exterior afirman ser víctimas de tráfico humano. Así lo aseguran The Washington Post y la NBC en una investigación que realizaron, de forma conjunta, junto al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación.

El informe asegura que en al menos cuatro bases militares estadounidenses situadas en el Golfo Pérsico se estaría contratando a trabajadores a los que se les somete a prácticas laborales abusivas: no les dejan cambiar de trabajo, se les confisca su pasaporte o tienen que pagar cantidades desorbitadas en concepto de tasas de reclutamiento ilegales, según revela la información.

Precisamente esto último es lo que le pasó a Mohammed. Él es un joven trabajador de servicios de alimentos de Bangladesh y trabaja en una base en Kuwait. Y, como cuenta en The Washington Post, tuvo que pagar por conseguir un trabajo. Concretamente 6.000 dólares para conseguir un trabajo en el Campamento Arifjan del Ejército. "La vida no es fácil. Mi familia tiene problemas, y sólo yo estoy trabajando. Tengo padres, dos hermanos y una hermana a los que tengo que mantener", explica el joven que tuvo que trabajar dos años y medio únicamente para pagar el préstamo que su padre había solicitado para pagar la tasa de reclutamiento.

Lo mismo le sucedió a Abdullah. Él contó su historia a la NBC. Un relato similar al de Mohammed. Él tuvo que pagar alrededor de 10.250 dólares por conseguir un trabajo en Tamimi Global Co. La empresa lo envió como lavaplatos a Camp Buehring, una base del ejército estadounidense en Kuwait. Cobraba unos 260 dólares al mes (mucho menos del salario que le ofrecían al principio, unos 660 dólares) y trabajó 12 horas al día, sin ningún día libre durante tres años. Como explica a la cadena americana, él no era el único, otros 400 trabajadores pasaron por lo mismo. Sin embargo, asegura, no tenían otra opción: firmaron un contrato y entregaron su pasaporte. "¿Qué podíamos hacer? Extrañaba a mi mamá. Lloraba todos los días", relataba.

'Tolerancia cero'

El gobierno estadounidense asegura que no sabían nada de las condiciones que atravesaban trabajadores como Abdullah o  Mohammed. Así lo asegura la comandante Nicole Schwegman, portavoz del Departamento de Defensa, cuando los periodistas le enseñaron las pruebas que habían recabado.

El Departamento de Defensa promueve  la política de tolerancia cero del gobierno de Estados Unidos sobre la trata de personas. El Departamento continúa trabajando diligentemente en la lucha contra la trata de personas porque estas actividades violan los derechos humanos y dañan nuestra misión de seguridad nacional.

Sin embargo, según cuenta la NBC, esto podría no ser del todo cierto. Durante su investigación, aseguran, encontraron una evidente falta de transparencia. Cuentan que, desde 2017 hasta 2021, los "propios militares tomaron medidas en 176 incidentes de violaciones laborales por parte de contratistas y subcontratistas" y que los militares "corroboraron violaciones que involucran a más de 900 trabajadores" únicamente en el año 2020, según datos del Departamento de Justicia.

Datos que corrobora Latesha Love, directora del equipo de Asuntos Internacionales y Comercio de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno. Ella es quien investiga la trata de personas en las bases militares del país. Y que ratifica esta investigación:

El dinero de nuestros contribuyentes se está utilizando potencialmente para apoyar el trabajo forzado y la trata de personas, y eso es simplemente inaceptable. La forma en que los trabajadores son tratados es similar a lo que algunos podrían llamar esclavitud moderna.