Un condenado a muerte en Alabama pide que lo ejecuten: "Es lo correcto"

Derrick Dearman fue sentenciado por la muerte de seis personas en el año 2016.

Derrick Dearman no apelará su sentencia de muerte. Se trata de un asesino convicto condenado a muerte en Alabama que envió nueve cartas a la gobernadora de Alabama, Kay Ivey, al fiscal general Steve Marshall, así como a los jueces informándoles que abandonará sus apelaciones y quiere que se cumpla su condena y ser ejecutado.

“Es hora de hacer lo que sé que es correcto y lo que sé que debo hacer (...) Siento en mi corazón que esta es la única opción que ayudaría a las familias de las víctimas a lograr el cierre que necesitan para seguir adelante”, dijo Dearman durante una entrevista telefónica con CNN desde el Centro Correccional William C. Holman en Atmore, Alabama.

La posición de Dearman se conoce dos meses después de que la Corte Suprema de Alabama rechazara una apelación y ratificara sus seis condenas por homicidio, Dearman hizo su declaración. Se le imputaron seis asesinatos. El hombre explicó que cumplió con el proceso de apelación por petición de los familiares de las víctimas.

Los hechos por los que fue condenado, iniciaron el 20 de agosto de 2016, cuando Dearman, equipado con un hacha y armamento, ingresó violentamente a un bungalow en las afueras rurales de Citronelle, Alabama. Bajo los efectos de la metanfetamina, atacó a las personas mientras dormían.

Shannon Melissa Randall, Robert Lee Brown, Justin Kaleb Reed, Joseph Adam Turner y Chelsea Marie Reed, quien estaba en el quinto mes de embarazo, perdieron la vida. Dearman escapó del lugar, llevándose al hijo menor de dos de las víctimas. Dearman, del condado de Greene, posteriormente se entregó a las autoridades locales. El 31 de agosto de 2018, admitió su culpabilidad. Un jurado sugirió la imposición de la pena de muerte.

Entre tanto, la oficina del fiscal general de Alabama, Steve Marshall, recibió la carta, según pudo confirmar CNN.