SCOTUS permite que Idaho aplique la ley que prohíbe los tratamientos trans en menores

El fallo del Alto Tribunal permite a las familias de los dos demandantes que continúen con el procedimiento.

El Tribunal Supremo de EEEUU (SCOTUS, por sus siglas en inglés), permitió a Idaho que aplique la ley que prohíbe los tratamientos de cambio de sexo a menores mientras se resuelve el recurso de inconstitucionalidad presentado contra la norma. El fiscal general del Estado de la Gema, Raúl Labrador, presentó un recurso ante el Supremo tras la decisión de un tribunal inferior de suspender la entrada en vigor de la ley tras la denuncia de las familias de dos menores que están recibiendo tratamiento hormonal. Idaho, en lugar de entrar en el debate sobre los derechos trans, cuestionó si la corte inferior tenía potestad para anular la aplicación de la norma en todo el estado o tan sólo para los demandantes, que es lo que el Alto Tribunal ha aceptado.

Idaho celebra el fallo

La decisión no fue fácil y volvió a evidenciar la división existente en SCOTUS. El fallo fue aprobado con la oposición de las tres jueces progresistas y con el voto a favor de cinco de los seis conservadores. El presidente de la Corte, John Roberts, no hizo público el sentido de su voto ni se unió a ninguna de las opiniones de sus compañeros recogidas en el escrito publicado.

Quien sí habló fue Labrador, que celebró el fallo a través de un comunicado oficial y de varias publicaciones en X. El fiscal general de Idaho destacó que el Estado tiene "el poder y el deber" de proteger a los niños de las "devastadoras consecuencias de los fármacos y procedimientos utilizados en niños con disforia de género":

He sido testigo directo de las devastadoras consecuencias de los fármacos y procedimientos utilizados en niños con disforia de género. Y es una tragedia evitable. El Estado tiene el deber de proteger y apoyar a todos los niños, y por eso estoy orgulloso de defender la ley de Idaho que garantiza que los niños no sean sometidos a estos medicamentos y procedimientos que alteran sus vidas. Quienes sufren disforia de género merecen amor, apoyo y atención médica basada en la realidad biológica. Negar la verdad básica de que los niños y las niñas son biológicamente diferentes perjudica a nuestros hijos. Nadie tiene derecho a hacer daño a los niños, y estoy agradecido de que nosotros, como Estado, tengamos el poder -y el deber- de protegerlos.

El caso, en la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito

El caso está ahora en manos de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, que tendrá que decidir sobre la norma viola la Constitución o no tras el fallo el pasado diciembre de la juez de distrito Lynn Winmill, que suspendió su aplicación mientras que el litigio continuara al considerar que vulnera los derechos recogidos en la 14a Enmienda.