Planned Parenthood batió su récord de abortos en 2023: participó en el 40% de los realizados en el país

La compañía, que redujo las cifras en los servicios de salud que oferta, recibió casi 700 millones de la Administración Biden en subvenciones y reembolsos.

El informe anual de Planned Parenthood refleja que la multinacional del aborto realizó un número récord de éstos (392.715) durante el pasado curso. Una cifra que supone que más del 40% de estas intervenciones en todo el país fueron realizadas por este grupo. El informe refleja que mientras que las cifras de abortos crecieron, la compañía recortó notablemente sus cifras en muchos de los servicios de salud que ofrece. Asimismo, el reporte recoge que la entidad recibió 699,3 millones de dólares en subvenciones y reembolsos gubernamentales.

Casi 400.000 abortos en un año

El informe deja claro que la prioridad total y absoluta de Planned Parenthood, lejos de ser la salud, es la promoción y expansión del aborto, tanto dentro como fuera de las fronteras nacionales. Una realidad que desmiente el supuesto objetivo de la compañía de ser conocida como una empresa de salud y no como un mero centro abortista. Mientras que todos los servicios de salud ven recortes de entre el 1,4% hasta el 31%, los abortos se incrementaron en un 5% respecto al periodo anterior, alcanzando los 392.715.

Así,  las pruebas de Papanicolaou (para detectar el cáncer de cuello uterino), cayeron un 13,5%, los screening para la detección de cáncer un 1,5% mientras que las visitas de atención médica preventiva se desplomaron un 31,0%. Además del aborto, la compañía ha tomado la causa Trans como una de sus grandes banderas, mientras que ha dejado de lado otros aspectos como las adopciones, como indica que realizó un 4,5% menos de derivaciones  para este fin.

Esta cruzada ideológica les está saliendo rentable, no obstante. Según las cuentas presentadas por la compañía, la Administración Biden les otorgó 699,3 millones de dólares en subvenciones y reembolsos. Esto supone un 4,2% más que en 2022.

Una década priorizando el aborto y descuidando los servicios de salud

Las cifras son aún más contundentes si se tienen en cuenta los datos de la última década: los únicos apartados del informe que ven crecer sus cifras son el número de abortos (un 20%) y el dinero de los contribuyentes que llega a sus arcas (un 29,4% más). Este último aspecto es considerable, puesto que Donald Trump trató de asfixiare económicamente a la empresa durante su mandato.

El resto de campos de trabajo de la empresa no corrieron tanta suerte. En los últimos 10 años, los test de embarazo cayeron un 19,4% y las las derivaciones para adoptar un 21%. Aún más radical fue el desplome de las pruebas de detección de cáncer (un 58,6%) y, sobre todo, los servicios prenatales (67,6%).