Diez hipopótamos de la Hacienda Nápoles -el macrocomplejo del narcotraficante colombiano Pablo Escobar- llegarán a México en abril. Ernesto Zazueta, director del Santuario Ostok, un centro de rescate de animales ubicado en Sinaloa, informo de este traslado. También se planea llevar otros tantos de estos animales a la India.
En Colombia, el Gobierno de Gustavo Petro decidió enviarlos a ese país después de que escaparan de la famosa propiedad del capo de la droga. El objetivo del traslado es una medida tomada debido a que los animales representan una amenaza ambiental y social para la zona donde habitan.
Las autoridades ambientales colombianas calculan que los hipopótamos se han reproducido hasta llegar a ser más de 160 descendientes -de los 3 originales propiedad de Escobar- que viven y se extienden más allá de la hacienda (a 200 kilómetros de Bogotá). Prevén que debido a su capacidad de procreación podrían ser hasta 400 mamíferos en ocho años.
'Los hipopótamos de la cocaína', considerados "personas jurídicas" en EEUU
El Gobierno colombiano llevaba algún tiempo manejando las opciones de sacrificar o esterilizar a los animales para así frenar su reproducción. Sin embargo, esta idea provocó una gran polémica internacional. Tanto así, que en 2021, Animal Legal Defense Fund -un grupo en defensa de los derechos de los animales- presentó este caso en una corte de Ohio y lo ganó, logrando que los llamados 'hipopótamos de la cocaína' fueran declarados "personas jurídicas" en un fallo histórico en el país.
Desde entonces, los animales han provocado muchos accidentes con humanos y la inacción de las autoridades les ha permitido vivir en libertad por los ríos que conectan distintas áreas de la zona. Debido a esto, las autoridades del Departamento de Antioquia propusieron trasladarlos en avión hacia India y México (hasta ahora, sólo este último aceptó la solicitud). Intentaron también mudarlos a Ecuador, pero el país se negó a acoger parte de la colonia de hipopótamos que dejó el capo.
La gerente de Protección y Bienestar Animal de Antioquía, Lina de los Ríos Morales, explicó a The Associated Press que el proceso de captura para trasladarlos será atraerlos con comida y luego llevar a cada uno a un contenedor de hierro. Después, se movilizará a los animales por tierra hasta el aeropuerto local y de allí partirán hacia su nuevo hogar.
Debido a las proporciones de cada animal -su peso aproximado es de hasta tres toneladas- se intentará capturar a ejemplares más jóvenes cuya dimensión no sea la máxima que en su edad adulta.
El zoológico de Pablo Escobar
Pablo Escobar fue uno de los narcotraficantes más peligrosos de la historia. No sólo acumuló una fortuna de más de 10.000 millones de dólares -según Forbes- vendiendo droga en todo el mundo, sino que se convirtió para muchos colombianos -en su momento- en una clase de ídolo tras su paso por la política y sus acciones populistas. Sin embargo, la historia se encargó de contar la realidad de los acontecimientos y hoy en día es considerado uno de los criminales más sanguinarios del planeta.
El capo de la droga también era un amante de los animales exóticos y para cumplir uno de sus caprichos construyó un zoológico en su residencia (la Hacienda Nápoles) en los años 80. Esta creación le ganó el cariño y respaldo de la población quienes ingresaban gratis.
Se estima que había invertido dos millones de dólares comprando los animales de todo tipo (jirafas, elefantes, avestruces y otras especies) a un viejo zoológico quebrado en Dallas, (el Wildlife Park). Entre las especies había tres hipopótamos, dos hembras y un macho. De allí provienen los animales que serán trasladados a México y posiblemente a India.
Tras la muerte del narcotraficante, en diciembre de 1993, sus propiedades fueron confiscadas y la mayoría de los animales fueron trasladados a otros zoológicos.
La hacienda se convirtió en un atractivo turístico y conservó algunas de las otras especies.
