Moscú fue testigo de un ataque que dejó cientos de muertos y heridos en la tarde del viernes. El hecho tuvo lugar en el Crocus City Hall, minutos antes del inicio de un concierto de la banda Picnic. Horas después, el Estado Islámico (ISIS) reconoció la autoría de los ataques.
Según afirmó el grupo mediante un comunicado difundido a través de Telegram, miembros del Estado Islámico "atacaron una gran reunión... en las afueras de Moscú, la capital rusa". La misiva señaló también que los atacantes se habían "replegado a sus bases de manera segura".
La banda Picnic se estaba preparando para salir a escena cuando un grupo de personas, luciendo uniformes con camuflaje, ingresaron al lugar y abrieron fuego aleatoriamente. No contentos con eso, arrojaron lo que pareció ser una granada o una bomba incendiaria.
