Todo lo que hay que saber sobre la Ley SAVE, el plan de los republicanos para que solo los ciudadanos americanos voten en las elecciones federales
La legislación, impulsada por Chip Roy (R-TX) en la Cámara de Representantes y por Mike Lee (R-UT) en el Senado, también cuenta con el apoyo del presidente Donald Trump.

Lee y Roy presentaron el proyecto de ley en sus respectivas cámaras/ Ting Shen, Mandel Ngan.
El Congreso está próximo a tratar la Ley de Protección de la Elegibilidad de los Votantes Estadounidenses (SAVE). Se trata de un esfuerzo republicano para exigir a las personas que se registren para votar en las elecciones federales que presenten una prueba de ciudadanía. Mientras que los republicanos aseguran que la legislación ayudaría a prevenir el “fraude electoral”, los demócratas hablan de “supresión de votantes”.
Esta ley, impulsada por Chip Roy (R-TX) en la Cámara de Representantes y por Mike Lee (R-UT) en el Senado, cuenta también con el apoyo del presidente Donald Trump. El entonces candidato a presidente presionó para que fuera incluida en la última legislación para evitar el Cierre del Gobierno, pero finalmente quedó afuera.
La Ley SAVE volverá al Congreso después de haber sido aprobada por la Cámara Baja a mediados del 2024. En aquella oportunidad, contó con el apoyo de todos los republicanos presentes y de cinco demócratas: Henry Cuellar (D-TX), Jared Golden (D-ME), Vicente González (D-TX), Marie Gluesenkamp Pérez (D-WA) y Donald Davis (D).
Tras no ser tratada por el Senado, Roy volvió a impulsar la legislación para el Congreso 119, donde espera poder aprobarla con mayoría republicana en ambas cámaras.


Política
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De la Corte Suprema a la Ley SAVE
El trasfondo de la legislación se remonta a un caso decidido por la Corte Suprema de Justicia en 2013, Arizona v. Inter Tribal Council of Arizona, Inc. Allí, el máximo tribunal del país anuló una ley estatal del Grand Canyon State que, entre otras cosas, requería que los votantes proporcionen una prueba de ciudadanía al registrarse para votar y que los funcionarios estatales rechazaran cualquier solicitud que no estuviera acompañada por una evidencia de ciudadanía mediante un documento válido.
La decisión fue de 7-2, con los jueces Antonin Scalia, Anthony Kennedy, John Roberts, Elena Kagan, Stephen Breyer, Ruth Bader Ginsburg y Sonia Sotomayor en la mayoría, mientras que Clarence Thomas y Samuel Alito escribieron la opinión disidente.
En concreto, la corte señaló que la ley de Arizona iba en contra de la Ley Nacional de Registro de Votantes de 1993 (NVRA), puesto que ordenaba que los funcionarios estatales rechacen incluso el Formulario Nacional de Registro de Votantes por Correo, protegido por la citada legislación.
En resumen, los jueces advirtieron que la NVRA, tal y como estaba redactada, se oponía a la capacidad de un estado para exigir una prueba de ciudadanía en elecciones federales.
La ley invalidada de Arizona tenía su origen en la Proposición 200, aprobada por los votantes en el 2004 con el 56% de los votos. La propuesta contó con una oposición bipartidista, incluyendo a los senadores John McCain (R), Jon Kyl (R) y la gobernadora Janet Napolitano (D).
Sin embargo, las boca de urna mostraron que el 47% de los votantes latinos votaron a favor de la iniciativa.
¿Qué haría la Ley SAVE?
En este contexto, la legislación pretende directamente modificar la NVRA para permitir que los estados puedan exigir una prueba de ciudadanía al registrar un votante para unas elecciones federales.
En concreto, haría lo siguiente
- Modificar la NVRA para exigir a los estados que obtengan pruebas documentales de la ciudadanía estadounidense al inscribir a una persona para votar en unas elecciones federales.
- Establecer un universo de medios aceptables para demostrar la ciudadanía y ordena a los estados que establezcan un proceso alternativo para quienes carezcan de prueba documental de ciudadanía, pero que sean, de hecho, ciudadanos.
- Requerir a los estados que establezcan un proceso para eliminar a los no ciudadanos de las listas de votantes existentes.
- Añadir sanciones federales por inscribir a sabiendas a un no ciudadano para votar en unas elecciones federales.
¿Qué documentos aceptaría la Ley SAVE para registrarse en elecciones federales?
De acuerdo con el texto de la legislación, las personas deberán presentar una documentación compatible con la Ley REAL ID de 2005, que indique ciudadanía estadounidense, un pasaporte u otro documento de ciudadanía.
En caso de presentar una identificación que no detalle la ciudadanía o indique el lugar de nacimiento, se deberá añadir un certificado de nacimiento, un certificado de naturalización, un decreto de adopción u otras formas de documentación enumeradas en la legislación que demuestren la situación legal del interesado o el lugar de nacimiento.
">Pass the SAVE Act
— Mike Lee (@BasedMikeLee) February 23, 2025
Only U.S. citizens should vote in U.S. elections https://t.co/HjZGNkdTJ7
A favor y en contra
Según la página web del congresista Roy, la legislación apunta a excluir a los inmigrantes ilegales de las elecciones federales, fortaleciendo el sistema electoral en el proceso.
“Las elecciones estadounidenses pertenecen a los ciudadanos estadounidenses, y la confianza del público en esas elecciones es la piedra angular de nuestra república”, expresó el republicano de Texas.
“Una gran mayoría de nuestros compatriotas está de acuerdo: sólo los ciudadanos estadounidenses deberían poder registrarse y votar en las elecciones estadounidenses. La Ley SAVE da a los estados la capacidad de impedir el registro ilegal de votantes y proteger las urnas de la interferencia electoral extranjera”, manifestó el senador Mike Lee, quien introdujo el texto en la Cámara Alta.
A su vez, la legislación cuenta con el apoyo de organizaciones como Only Citizens Vote Coalition, Immigration Accountability Project y Article III Project.
">Hakeem Jeffries calls the SAVE Act a voter suppression bill. pic.twitter.com/YV5Vc630qV
— Freyja™ (@FreyjaTarte) July 10, 2024
Mientras que los republicanos aseguran que la legislación ayudaría a prevenir el “fraude electoral”, los demócratas argumentan que crearía barreras “innecesarias” en el proceso de registro, dejando afuera a muchos votantes que hoy serían elegibles.
Durante el anterior debate para evitar el Cierre del Gobierno, Hakeem Jeffries describió a la Ley SAVE como “un proyecto de ley de supresión del voto", agregando también que la legislación es redundante.
“La legislación actual es muy clara: ¿qué tiene de complicado que, según la Constitución de los Estados Unidos y la ley federal, sólo los ciudadanos puedan votar en las elecciones federales?”, añadió.
Desde el Campaign Legal Center (CLC), una organización no gubernamental de tendencia izquierdista, advirtieron que la Ley SAVE “amenazaría gravemente el registro por correo y exigiría que los sistemas de registro en línea se reformen para cumplir con los requisitos de la ley”. En efecto, la legislación menciona que las personas deberán presentar la documentación en persona.
Sobre los cambios propuestos en los documentos aceptados, desde el CLC advirtieron que “las personas de color, las personas casadas que han cambiado sus nombres, así como los jóvenes y los ancianos tienen más probabilidades de tener dificultades para acceder a estos documentos”.
“La gran mayoría de los estados no verifican realmente la ciudadanía de las personas que se registran para votar”
VOZ habló en exclusiva con Hans von Spakovsky, jurista senior legal fellow en el Edwin Meese III Center for Legal and Judicial Studies de The Heritage Foundation y director de la Iniciativa para la reforma electoral del citado think tank. Von Spakovsky incluso participó en la redacción de la Ley SAVE junto con el congresista Roy.
Sobre la actualidad del sistema electoral en los Estados Unidos, destacó algunos avances desde las elecciones del 2020 pero dejó en claro que falta camino por recorrer. “Sigue teniendo muchos problemas. Uno de los peores es que, en esencia, hemos tenido un sistema de honor para registrarse para votar y que la gran mayoría de los estados no verifican realmente la ciudadanía de las personas que se registran para votar”, señaló.
A su vez, aseguró que la Ley SAVE es necesaria y que en esencia llegaría para evitar que las personas que no deberían votar lo terminen haciendo. Para ejemplificar su punto, explicó que hay ciertos estados, como Texas, Virginia o Alabama, en los que comenzaron a comparar su lista estatal de registro de votantes con su lista de licencias de conducir.
“Cuando las personas van a obtener una licencia de conducir, tienen que proporcionar una prueba de su identificación y también de su residencia. Y te piden que demuestres si eres o no ciudadano estadounidense. Y eso se anota en tus registros. Puedes obtener un permiso de conducir, aunque no seas ciudadano estadounidense y estés legalmente en EE.UU.”, señaló.
“Pero cuando compararon esas listas, Texas encontró 6.500 individuos que, cuando obtuvieron sus licencias de conducir, presentaron documentación que indicaba que no eran ciudadanos estadounidenses, y sin embargo estaban registrados para votar. Virginia descubrió a 6.300 personas justo antes de las elecciones. En Alabama se encontraron más de 3.000 personas que no eran ciudadanos estadounidenses y que estaban registradas para votar”, continuó von Spakovsky.
Sobre las declaraciones de Hakeem Jeffries, el experto aseguró que se trata de “una afirmación absurda”.
“Es exactamente la misma tontería que se decía hace 20 años, cuando los estados empezaron por fin a aprobar leyes de identificación de los votantes. (…) Georgia, por ejemplo, uno de los primeros estados del país en imponer el requisito de mostrar una tarjeta de identificación con fotografía, ha tenido un récord de registro y de participación en el estado desde que impuso ese requisito de identificación”, sentenció von Spakovsky.
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