En un intento por combatir la crisis de fentanilo, el gobernador de Texas, Greg Abbott, firmó una propuesta legislativa que aumentará las sanciones penales por delitos relacionados con esta droga.

Abott acudió al Capitolio de Texas la tarde de este miércoles para avanzar con el Proyecto de Ley 6 de la Cámara de Representantes y hacer que los fiscales puedan acusar de asesinato a una persona que fabrica o entrega fentanilo, si alguien muere como resultado de ello.

“El fentanilo ha cobrado demasiadas vidas”, dijo el gobernador tras firmar la ley que entrará en vigor el 1 de septiembre.

Una vez que ley entre en vigencia se podrá agregar en los certificados de defunción causas como “envenenamiento por fentanilo” o “toxicidad por fentanilo” si en los informes de toxicología de las personas fallecidas se encuentra una cantidad de la sustancia que se considere letal.

Según comentó Abott hace un par de meses, el fentanilo se convirtió en la principal causa de muerte entre los estadounidenses de 18 a 45 años, por lo que decidió convertir este tema en una prioridad.

“Hice de la lucha contra la crisis del fentanilo un tema de emergencia para la sesión legislativa ordinaria. Texas salvará más vidas del flagelo del fentanilo,” explicó.

Se cuadriplican las muertes relacionadas con el fentanilo

De acuerdo a un informe que publicó recientemente el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el número de muertes relacionadas con el fentanilo se cuadriplicaron entre 2016 y 2021, pasando de registrarse 5,7 muertes por sobredosis por cada 100 mil personas a una tasa de 21,6 muertes por cada 100 mil habitantes.

Esta droga se ha convertido en uno de los problemas más importantes con los que está lidiando el país, ya que es hasta 50 veces más fuerte que la heroína e incluso 100 veces peor que la morfina.