El presidente electo Edmundo González Urrutia abandona Venezuela y se exilia en España
José Manuel Albares, ministro de Relaciones Exteriores español, confirmó que el líder opositor aterrizó en Madrid este domingo.
Edmundo González Urrutia, vencedor de las elecciones presidenciales venezolanas como candidato de la Plataforma Unitaria, abandonó este sábado Venezuela para exiliarse en España.
El que fuera rival de Nicolás Maduro durante las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio aceptó retirarse a España después de que el Gobierno venezolano asegurase haberle ofrecido un "salvoconducto" en su paso por "la paz política del país".
Fue la vicepresidente Delcy Rodríguez quien, mediante un comunicado publicado en su cuenta de Instagram, informó de que González Urrutia había solicitado "la tramitación de asilo político" que el Gobierno de Venezuela había decidido concederle:
La información la confirmó, horas después, el abogado de González Urrutia, José Vicente Haro, que simplemente aseguró a France 24 "que se fue a España", alegando que no podía hacer más comentarios.
Sin embargo, una fuente cercana aseguró que el opositor de 75 años, que se mantuvo apartado de la vida pública desde el 30 de julio, se dirigía a España acompañado de su mujer, Mercedes.
Horas después, el ministro de Relaciones Exteriores del Gobierno de España, José Manuel Albares, aseguró en la red social X que Edmundo González Urrutia llegó a bordo de un avión de las Fuerzas Aéreas españolas rumbo a la base de Torrejón de Ardoz, Madrid:
Una hora antes, la líder opositora María Corina Machado salió en defensa de González Urrutia asegurando que había abandonado Venezuela para "preservar su libertad y su vida" y aseguró que será juramentado como presidente el 10 de enero de 2025:
La complicada situación política de Venezuela
Recuerda AFP que la noticia llega en medio de una crisis política desatada tras las presidenciales. El Consejo Nacional Electoral (CNE), afin al Gobierno, otorgó la victoria a Maduro con un 52% de los votos, reeligiéndolo para un tercer mandato de seis años.
Por su parte, la oposición aseguró que no habían sido unas elecciones transparentes ya que la autoridad electoral aún no ha mostrado el escrutinio detallado mesa por mesa como exige la ley, argumentando que habían sufrido un jaqueo en sus sistemas.
Por este motivo, la oposición aseguró que la victoria, con más del 60% de los votos, pertenecía a González Urrutia. Información que obtuvieron de un sitio web donde digitalizaron actas de escrutinio recopiladas por testigos y que provocó que la justicia venezolana, acusada de servir al chavismo, abriese una investigación contra González Urrutia acusándolo de publicar copias de las actas electorales para probar su victoria.
Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina se posicionaron del lado de González Urrutia y no dieron por válidas las elecciones, solicitando una verificación de los votos que, aún, no se ha producido. Ante esto, Washington reconoció al candidato de Plataforma Unitaria como vencedor de los comicios.
Esto desencadenó una serie de protestas en Venezuela que terminaron con 27 muertos, 192 heridos y 2.400 detenidos, muchos de ellos menores de edad. Manifestaciones que, poco a poco, se fueron extendiendo por el resto del mundo.