De Twitter a X: los cambios que ha vivido la red social un año después de que Elon Musk la comprase
En 365 días, la red social cambió su logo, su nombre, despidió a miles de empleados y realizó varias entregas en las que su propietario destapó el uso indebido que se había realizado de la plataforma.
Hace un año, Elon Musk se hacía con Twitter. Era el fin de una compra que le había llevado meses y que, según definió él mismo, suponía que "el pájaro había sido liberado". 365 días después, la plataforma no sólo ha sido liberada, como afirmaba el magnate en aquel momento, sino que cambió de nombre y de logo, despidió a gran parte de su plantilla, contrató a una nueva CEO e, incluso, inició versiones de pago. Estos han sido los cambios más importantes que ha sufrido X (anteriormente Twitter) un año después de que Musk se hiciese con ella.
"El pájaro ha sido liberado"
Elon Musk aterrizaba en la sede de Twitter un 27 de octubre de 2022. Lo hacía de una inusual forma, con un cambio de bio en su cuenta que lucía su nuevo cargo: "Chief Twit" así como de localización que cambió a "Twitter HQ". Su primera entrada en la red social la inmortalizó con un vídeo. En él se mostraba cómo Musk entraba en la sede Twitter, lavabo en mano y con una sonrisa en la boca.
Ese mismo día, el magnate enviaba una misiva a los anunciantes de la red social. En ella, aseguraba que la razón principal por la que se hacía con la plataforma era porque veía necesario "para el futuro de la civilización tener una plaza común digital, donde se pueda debatir una amplia gama de creencias de manera saludable, sin recurrir a la violencia".
Un día después, Elon Musk oficialmente se convirtió en el dueño de Twitter tras pagar 44.000 millones de dólares por ella. Lo anunció, de nuevo, en su nueva red social y lo hizo tras asegurar que "el pájaro está liberado":
Despidos en Twitter, la primera gran medida
Tras esto, comenzaron las primeras medidas que tomaría el magnate como nuevo propietario de la red social: despidió a los principales ejecutivos de la compañía. Algunos de los que perdieron ese día su trabajo fueron el consejero delegado, Parag Agrawal; el director financiero, Ned Segal; y el consejero general, Sean Edgett. También se quedó sin empleo Vijaya Gadde, quien fue durante mucho tiempo la responsable de asuntos legales de Twitter.
Fueron los primeros que perdieron su empleo. Pero los recortes en Twitter no habían hecho más que comenzar. Ya antes de que Musk se convirtiese en el nuevo dueño, The Washington Post aseguró que el magnate pretendía deshacerse del 75% de la plantilla. Y los despidos no tardaron en llegar. El 3 de noviembre, una semana después de que Musk aterrizase en Twitter, la plantilla ya se había reducido y 1.000 personas habían perdido su empleo.
Durante los siguientes días, otras 2.700 personas también fueron despedidas de la compañía. Todas ellas fueron notificadas por correo electrónico. Un día después, Elon Musk aseguró que los despidos se acometieron ya que Twitter perdía cerca de 4 millones de dólares al día:
Las personas que mantuvieron su empleo, por otra parte, también recibieron una notificación en su cuenta laboral asegurando que debían regresar a las oficinas ya que Twitter dejaría de permitir a sus trabajadores que teletrabajasen.
Primer gran fracaso: el sistema de verificación
Una de las primeras promesas que hizo Elon Musk al convertirse en su nuevo propietario fue asegurar que cambiaría su sistema de verificación. Y lo hizo. Llegaba Twitter Blue y por un precio de ocho dólares al mes, todos los usuarios que lo quisieran podían tener su check azul.
Sin embargo, la primera versión dio varios errores. Se multiplicaron las cuentas verificadas falsas y la red social tomó medidas como un doble check para indicar cuál era real y cuál no. Esa medida no sirvió de mucho y, a las pocas horas, el magnate aseguraba que "mataba" el doble sistema de verificación.
En ese momento, para saber si una cuenta obtenía el check azul tras pagar o por méritos propios, había que clicar en la marca de verificación y salía un mensaje mostrando la razón por la que tenía ese símbolo. Musk aseguró que la medida era temporal y dos días después, el magnate daba marcha atrás y suspendía la versión de pago.
La Casa Blanca vigila Twitter, regreso de Trump y los indultos de Musk
La compra de Twitter por parte de Musk generó un interés mundial, llegando a la Casa Blanca. En noviembre de 2022, Karine Jean-Pierre aseguraba a los medios que el Gobierno había estado vigilando la compañía desde la llegada de su nuevo propietario y que continuaría haciéndolo:
Ese comentario llegaba días después de que Musk anunciase que daba algunos indultos a las cuentas suspendidas por la compañía. El primero que recibió ese perdón fue el expresidente Donald Trump. Tras dos años, el ahora candidato a las primarias republicanas recuperó su perfil de la red social el 20 de noviembre de 2022 y fue Musk quien anunció que, tras una encuesta a los usuarios, el magnate recuperaba el acceso a la red social:
Llegan los 'Twitter Files': primera entrega, la censura sobre la computadora de Hunter Biden
El 3 de diciembre de 2022, Musk comenzaba los ya conocidos como Twitter Files. En el primero de ellos, el empresario, con la ayuda del periodista estadounidense Matthew C. Taibbi, destapaba todo lo que había ocurrido con la censura sobre el laptop de Hunter Biden.
En el hilo, se descubría que Twitter había manipulado información sobre el caso, llegando a publicar pruebas falsas sobre el mismo. Es más, el periodista estadounidense aseguró que para impedir que el caso viera la luz, se llegó a emplear métodos que sólo se utilizan de "forma extraordinaria" para casos de pornografía infantil.
Tras esto, las investigaciones sobre el caso de Hunter Biden continuaron. Primero, se investigó el papel del FBI en todo el entramado; después, el Congreso entró en escena y aseguró que interrogaría al personal de Twitter por censurar la historia.
Pero las filtraciones continuaban y llegaba el turno de Yoel Roth, el exjefe de seguridad de Twitter. Él declaró que tuvieron reuniones con el FBI y que durante esas charlas, el organismo gubernamental les incitó a censurar la historia. Finalmente, Musk se unió a las represalias y decidió , el principal abogado de la empresa a raíz de "las preocupaciones sobre el posible papel de Baker en la supresión de información importante para el diálogo público", según declaró el propietario de Twitter.
Segunda entrega de 'Twitter Files': existencia de una "lista negra" para limitar el alcance de usuarios
La oficina de Katie Hobbs era una de las protagonistas de la segunda entrega de los Twitter Files. Según se desveló el 5 de diciembre, la Administración de la gobernadora electa de Arizona, Katie Hobbs, solicitó a Twitter que censurasen varios tuits con el objetivo de silenciar a sus oponentes políticos antes de las midterms.
La excolumnista de The New York Times, Bari Weiss era esta vez la persona en la que confiaba Musk para publicar la segunda tanda de filtraciones sobre la actividad de Twitter previa a su llegada. Y esta filtración se centró, principalmente, en demostrar la existencia de una "lista negra" secreta cuya misión era desfavorecer a ciertos usuarios limitando la visibilidad de sus tuits.
Entre los afectados por esta "lista negra" se encontraban personas como el Dr. Jay Bhattacharya, profesor de medicina, economía y política de la Universidad de Standford y negacionista de algunas de las medidas tomadas durante la pandemia del coronavirus; el presentador de programas de entrevistas, Dan Bongino; o el activista Charlie Kirk.
Donald Trump, protagonista de la tercera, cuarta y quinta entrega de los 'Twitter Files'
Donald Trump fue el claro protagonista tanto de la tercera como de la cuarta entrega de los Twitter Files. En la tercera entrega, y de nuevo con la ayuda del periodista estadounidense Matt Taibi, Musk reveló los detalles detrás de la censura del expresidente republicano:
Esta primera parte se centró en los días previos a lo que sucedió en el Capitolio y, en ella, se explicó cómo se llegó a usar un "filtro de visibilidad" que afectaba a cualquier publicación realizada por Trump.
La cuarta entrega, también centrada en Donald Trump, corrió a cargo del periodista Michael Shellenberger y, en ella, desvelaron cómo la plataforma modificó parte de sus propias políticas para censurar a Trump de por vida.
Esta vez se explicaron las decisiones tomadas después de lo ocurrido en el Capitolio el 6 de enero de 2021 y contó cómo, desde el día 7, "a medida que aumenta la presión, los ejecutivos de Twitter construyen el caso para una prohibición permanente".
La quinta entrega, a cargo de la periodista Beri Weiss, se enfocó únicamente en la eliminación de la cuenta de Donald Trump. Para ello, el hilo comenzó en la mañana del 8 de enero de 2021 y compartió publicaciones internas en las que queda claro que el personal asignado para valorar el caso llevó a cabo una evaluación de los tuits en donde se debatió si se podría censurar al ser "incitación". Sin embargo, se concluyó que, en ese momento, Trump no había violado ninguna de las políticas de Twitter.
Musk expone a Yoel Roth
El exjefe de Seguridad y Confianza de Twitter, Yoel Roth, se convirtió en el blanco de Elon Musk el 10 de diciembre. Esa fue la fecha en la que el empresario decidió publicar un extracto de la tesis doctoral de Roth realizada en 2016, cuando estudiaba en la Universidad de Pensilvania. Ese escrito, que Roth tituló como "Gay Data", fue la prueba que Musk necesitaba para sugerir que el exempleado de Twitter estaba a favor de que los niños accediesen a aplicaciones de citas.
Nueva prueba del sistema de verificación: los checks de tres colores
En diciembre de 2022, Musk vuelve a probar suerte con su polémico sistema de verificación. Esta vez, para evitar conflictos, propone que los checks sean de tres colores para que quede clara la función de cada uno: el dorado estará destinado a las empresas y los medios de comunicación; el gris irá para las entidades gubernamentales y otras instituciones; y el habitual check azul lo emplearán los individuos, sean celebridades o no.
Además, Musk propone que, con el objetivo de asegurar que las cuentas siempre sean reales, el check de una cuenta desaparecería hasta poder volver a ser verificado por la compañía si, por ejemplo, se cambiaba la foto de perfil, nombre de usuario o el nombre de perfil.
Junto a esto, Musk anunció que todo aquel que tenía la verificación antes de que él adquiriese la compañía -ya sea por ser periodista, celebridad o figura pública- perdería el check si no pagaba por Twitter Blue. Algo que, meses después, cumplió.
Menos anuncios, tuits más largos y aumento del precio a determinados dispositivos
No es la única novedad que trae Twitter Blue. La compañía dirigida por Elon Musk anunciaba también un aumento de precio para los usuarios que adquieran la versión de pago en dispositivos iOS (es decir, dispositivos Apple) que pasaba de 8 a 11 dólares al mes. El resto de dispositivos mantendría el precio de 8 dólares al mes, tal y como anunció Twitter:
Además, aquellos que paguen por la versión de pago no solo disfrutarán de su check azul, sino que también, durante las próximas actualizaciones verán menos anuncios, podrán tuitear vídeos de 1080p y con mayor duración y podrán acceder al conocido como "Reader mode," una versión que elimina el desorden, las distracciones y que incluye un soporte para los usuarios con dislexia. Junto con esto, también serán los primeros en disfrutar del nuevo límite de caracteres de Twitter que pasa de 280 a 4.000.
Sexta y séptima entrega de los 'Twitter Files': el FBI, en el punto de mira
En diciembre de 2022, Elon Musk vuelve retomar sus Twitter Files. Lo hizo anunciando que daría “el golpe de gracia” con la sexta entrega de los archivos de Twitter llamada “La subsidiaria del FBI”.
En esta ocasión toda la información fue publicada por el periodista Matt Taibbi, quien empezó el hilo explicando que se enfocaría en revelar la forma en que el gobierno estuvo recopilando, analizando e incluso marcando el contenido de las redes sociales. De hecho, Matt resaltó que el contacto entre Twitter y el FBI era tan constante que la empresa de comunicaciones parecía una especie de “subsidiaria”: "Entre enero de 2020 y noviembre de 2022, hubo más de 150 correos electrónicos entre el FBI y el exjefe de Confianza y Seguridad de Twitter, Yoel Roth".
La séptima entrega de estos Twitter Files se centra por completo en el papel que mantuvo el FBI a la hora de censurar la historia sobre el laptop del hijo de Joe Biden, Hunter. Y es el periodista Michael Shellenberger, uno de los habituales de Musk, el encargado de darla a conocer:
La octava y la novena entrega, recuerda Wikipedia, se centraron en las relaciones que mantuvo el Gobierno de los Estados Unidos con la red social. Se descubrió ahí cómo la plataforma había influido en las elecciones de varios países como Yemen, Siria y Kuwait.
Elon Musk anuncia que dejará de ser CEO
A mediados de diciembre, Elon Musk vuelve a hacer una encuesta en Twitter. Esta vez, el propietario de la red social pregunta si debería continuar en el puesto de CEO. El mismo que asumió al entrar en la empresa. Los resultados son claros: con un 57,5% de votos a favor de la renuncia, frente al 42,5% que quería que Musk continuase en el puesto. Participaron nada menos que 17.502.391 usuarios en el sondeo. El veredicto marcó el final de Elon Musk al frente de la empresa:
Sorprendentemente, los usuarios le pidieron que dé un paso atrás y él, al igual que hizo en cada una de las encuestas anteriores, decidió hacerles caso. Comenzó desde ese momento la búsqueda de un nuevo director ejecutivo para la red social.
Décima entrega de los 'Twitter Files': desinformación sobre el covid-19
A finales de 2022, los Twitter Files vuelven a ocupar los titulares de los principales medios. Esta vez se enfoca en la forma en la que la red social manipuló la información sobre el covid-19.
El periodista David Zweig fue el encargado de revelar los detalles y empezó con una publicación asegurando que Twitter no solo censuró a usuarios, sino que también desacreditó a médicos y expertos. Según el hilo de publicaciones, una vez más el Gobierno estuvo involucrado en la manipulación que hubo en Twitter y en otras plataformas de redes sociales.
Un mes después, se desvela cómo las grandes empresas farmacéuticas que fabricaron las vacunas contra el covid-19 presionaron a Twitter para censurar a activistas que pedían vacunas genéricas para países de bajos recursos.
De acuerdo a las publicaciones del periodista Lee Fang, en el año 2020 hubo un acuerdo internacional para que se hiciera pública la información que fuese surgiendo sobre las vacunas contra el coronavirus. La intención fue poder crear opciones genéricas y de bajo costo, para que los países con menos recursos pudieran acceder con mayor facilidad a ellas y resolver rápidamente la emergencia sanitaria que había en todo el mundo.
Vuelven los despidos a Twitter
En febrero de este año, la red social vuelve a retomar los despidos y prescinde del 10% de la plantilla total de la red social. De esta forma, doscientos trabajadores de la red social perdían su empleo, incluida la jefa de la versión de pago que Musk había implantado. Es ella misma quién confirma su despido y lo hace mediante una publicación en la red social:
Linda Yaccarino, nueva CEO de Twitter
El 12 de mayo de 2023, Elon Musk anuncia que ya tiene sucesor. Además, asegura que su reemplazo es una mujer y que llegará a la red social en tan solo seis semanas. Junto con esto, el magnate también anuncia nuevas novedades para la plataforma. La primera de ellas es el cambio de nombre, que pasa de ser Twitter Inc. a X Corp. Además, también anuncia el nuevo puesto que adoptará en la empresa: "Mi rol pasará a ser presidente ejecutivo y CTO, supervisando productos, software y sysops", explicó.
Horas después, Elon Musk asegura que será la publicista Linda Yaccarino quien asumirá el rol de CEO en la compañía. Musk asegura que Yaccarino se enfocará en las operaciones comerciales, mientras que su antecesor, el mismo Musk, quedará encargado del diseño de producto y las nuevas tecnologías. ¿El objetivo del tándem? "Transformar la plataforma en X, la aplicación para todo", en palabras del empresario sudafricano.
Yaccarino aterriza oficialmente el 12 de junio en la red social y lo hace mediante un hilo en el que explica las motivaciones que la llevaron a asumir el cargo de CEO. De esta forma, Yaccarino explica que su decisión de unirse a la red social vino motivada por su profunda admiración al antiguo directivo de la compañía: "Elon sabía que la exploración espacial y los vehículos eléctricos necesitaban una transformación, así que lo hizo".
La misión de Musk después se amplió y pasó a incluir a los medios de comunicación. Ahí es donde, explica la directiva, entró en juego Twitter: "También se está volviendo claro que la plaza de la ciudad global necesita una transformación, para impulsar la civilización a través del intercambio de información sin filtrar y el diálogo abierto sobre las cosas que más nos importan".
Pelea entre multimillonarios: Musk reta a Zuckerberg a luchar en una jaula
A finales de junio, Elon Musk reta a Zuckerberg a pelear en una jaula. El propietario de Twitter aprovechó un hilo en su red social para asegurar que estaría dispuesto a protagonizar un combate con el CEO de Meta. Lo hizo tras una serie de comentarios en los que un usuario de la plataforma insinuaba que Zuckerberg podría lanzar una red social que rivalizase con Twitter, llamada Threads.
Ante esto, Musk contestó, en tono irónico, que esto sólo era un movimiento más que demostraba que "la Tierra no puede esperar para estar exclusivamente bajo el control de Zuck sin otras opciones". La reacción de otro usuario no tardó en contestar: "Ten cuidado, Elon Musk, he escuchado que ahora practica jiu jitsu".
El reto llegó a oídos de Zuckerberg que no dudó en aceptar. Lo hizo mediante su otra red social, Instagram. Allí apareció una story en la que el empresario contestaba a Musk lo siguiente: "Envíame la ubicación".
Tras esto, comenzó una serie de intercambios entre ambos y una de las historias más seguidas durante ese verano. Tras confirmarse la pelea, se decidió que ésta tendría lugar en el Coliseo de Roma, aunque antes se había barajado Las Vegas Octogon. Ambos CEOs comenzaron a entrenar y a retarse. Sin embargo, la pelea aún no ha tenido lugar y no parece que vaya a suceder pronto, ya que no tiene una fecha oficial, algo que criticó Zuckerberg.
Cambio de nombre y logo: adiós a Larry, el pájaro y a Twitter, llega X
El magnate anunció a finales de julio que pretendía cambiar el nombre de la plataforma por uno nuevo: X. La letra, explicó, tiene un significado especial para él. Sin embargo, el gran cambio llega cuando el magnate informa de que junto a Twitter también debemos despedirnos de Larry, el pájaro, que será sustituido por un nuevo logo.
Días después, tanto Musk como la directora ejecutiva de la red social, Linda Yaccarino anuncian a través de sus perfiles que la red social es, desde ese momento, X. Para celebrar el comienzo de la nueva etapa, el nuevo logo, una X, fue proyectado sobre la fachada de los cuarteles generales de la empresa. El dominio "x.com" también conduce desde ese momento a "twitter.com".
X duplica el coste de la verificación dorada destinada a empresas
En agosto de este año, la red social X, anteriormente conocida como Twitter, da otro paso que enfureció a las empresas. A partir de ese momento, aquellas compañías que deseen su check dorado deberán pagar el doble de lo que hacían para mantenerlo.
Hasta entonces, obtener esta verificación costaba a las empresas hasta 1.000 dólares al mes. El precio no varía pero Elon Musk decidió poner una condición a las empresas que deseen mantener esta identificación dorada: a partir del 7 de agosto, si no destinan la misma suma que lo que cuesta conseguir el check (1.000 dólares) en publicidad mensual en la red social, perderán su verificación.
La noticia la dio a conocer Wall Street Journal, que informó de que varias empresas en Reino Unido y en la nación habían recibido una carta de X informando de estos cambios para que pudieran mantener el check dorado. Ahí, X aseguró que las compañías que no hubieran gastado $1.000 en los últimos 30 días o $6.000 en los últimos 180 perderían su marca de verificación.
Subastan el pájaro de Twitter
La era de Twitter llegaba a su fin en agosto de este año. Tras cambiar el logo y el nombre de la conocida red social, Elon Musk decidió acabar por completo con la antigua identidad de la plataforma. Para ello, el magnate decide deshacerse de todos los artículos que podrían recordar a la antigua marca y se alía con la compañía Heritage Global Partners para realizar una subasta en la que se incluye hasta el pájaro que decoraba el exterior de la oficina de San Francisco.
La puja comenzó el 12 de septiembre e incluyó un total de 584 artículos, entre los que se incluyen una gran jaula de pájaros soldada con un pájaro con el logotipo de Twitter, numerosas estatuas de los iconos de hashtags y "@", un cuadro del selfie viral que Ellen DeGeneres publicó en la red social durante los Óscars de 2014, otra pintura de Barack Obama celebrando su reelección o numerosos instrumentos musicales.
También se incluye varios logos de Larry, el pájaro de Twitter en la subasta. Eso sí, en un par de ellos, advierte la casa de subastas, es necesario que el comprador disponga de "la contratación de una empresa con licencia SF con los permisos adecuados", ya que colocar una estructura de esas características en cualquier edificio, ya sea en el interior o en el exterior, requiere de un permiso especial.
X, ¿de pago?
Elon Musk aseguró el pasado mes de septiembre que se está planteando que X (anteriormente Twitter) pase a ser de pago. El CEO de Tesla y Starlink y también propietario de la plataforma se reunió con Benjamin Netanyahu y ambos dieron una rueda de prensa donde Musk dio a conocer esta novedad de la plataforma:
Las pruebas no tardaron mucho en comenzar. X comenzó a implantar su versión de pago hace tan sólo unas semanas. Lo hizo en donde, explicó la propia red social, los nuevos usuarios tendrían que pagar un dólar anual para poder escribir en la red social. Sin embargo, aquellas personas que ya tuviesen una cuenta anteriormente, seguirían disfrutando de los beneficios de forma gratuita. Algo que horas después confirmó la propia plataforma:
X anuncia que incluirá llamadas y videollamadas
A finales de agosto, la red social anunciaba una nueva actualización. Una novedad que le permitirá competir directamente con WhatsApp: la red social incluirá la opción de realizar llamadas y videollamadas entre sus usuarios:
Según aseguró el magnate, esta opción, se podrá utilizar en los dispositivos iOS (Apple), Android, Mac y en PC. Además, a diferencia de otros servicios como WhatsApp, no será necesario que el usuario disponga de un número de celular, ya que estará ligado al perfil de X de esa persona en concreto. Una red social que, según el CEO de Tesla, es "la agenda efectiva de direcciones global". Todo ello, explicó, crea un "conjunto de factores es único" que le permiten a X dar ese nuevo paso.
Este miércoles, a tan solo tres días de que se cumpliese un año desde que Musk compró Twitter (ahora X), la plataforma estrenó esta nueva modalidad: ya es posible realizar tanto llamadas como videollamadas. Fue Elon Musk quien informó de que ya se había comenzado a implantar esta nueva herramienta para hacer llamadas de audio y video. Lo hizo mediante una publicación realizada este miércoles en la que explicaba cómo habilitar la nueva función.
Además, Musk detalló que se trata de una primera versión, lo que podría significar que haya cambios. "Primera versión de las llamadas de vídeo y audio en X", escribió el dueño de la plataforma.
Un año después, disminuye el uso de la plataforma
Tantos cambios no han sido vistos con buenos ojos por los usuarios de Twitter. Un año después, informa Axios, el uso de la plataforma se ha reducido considerablemente. Una encuesta realizada por Sensor Tower asegura que, entre octubre de 2022 y septiembre de 2023, el número de descargas de la aplicación se redujo un 38%. De ese 38%, el 57% pertenece únicamente a las descargas en Estados Unidos.
Ese mismo medio asegura que el uso de la red social también ha caído aunque de forma menos notable que las descargas. De esta forma, el uso mensual cayó un 14,8% a nivel global y un 17,8% en los Estados Unidos, aunque estos datos sólo pertenecen al mes de septiembre. Sin embargo, dejan ver que los cambios introducidos en X no han servido para mantener a sus usuarios que, motivados por la indecisión, van abandonando la red social.