El bajo rendimiento electoral en las comunidades negras e hispanas obliga a Biden a postergar su propuesta de prohibición de los cigarrillos mentolados

Este sabor de cigarros es muy popular entre dichas minorías y una medida polémica en este momento sería riesgoso de cara a las elecciones de noviembre.

La Administración Biden anunció repentinamente este viernes que cambió por completo su plan para prohibir los cigarrillos mentolados tras explicar que se necesita sopesar con más detalle los posibles beneficios o perjuicios para la salud pública que causaría una potencial prohibición a través de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés).

“Esta regla ha atraído una atención histórica y el período de comentarios públicos ha generado una inmensa cantidad de feedback, incluso de varios elementos del movimiento de derechos civiles y justicia penal”, dijo en un comunicado el secretario del HHS Xavier Becerra. “Está claro que aún quedan más conversaciones por mantener y eso llevará mucho más tiempo”.

De acuerdo con The Wall Street Journal, la decisión llega en un momento donde el presidente no se está desempeñando bien entre las comunidades negras e hispanas de cara a las elecciones del próximo mes de noviembre y, al tratarse de un sabor de cigarrillos muy popular entre dichas minorías, una medida polémica en este momento sería riesgoso en términos políticos.

El WSJ citó a Mitch Zeller, quien se desempeñó como director del Centro de Productos de Tabaco de la FDA hasta 2022 y afirmó que las consideraciones políticas influyeron directamente en la decisión de la Casa Blanca de retrasar la prohibición en torno a este tema de salud pública.

“La ciencia es clara en que habrá un enorme beneficio para la salud al eliminar los cigarrillos mentolados”, dijo Zeller al WSJ.

Por otra parte, también es un hecho que hay críticos de la prohibición porque se podría crear indirectamente un mercado negro que podría afectar especialmente a las minorías.

Por ejemplo, la representante Yvette Clarke (D-NY), quien integra el caucus negro del Congreso, dijo que estaba de acuerdo con la Administración Biden y su enfoque de abordar los daños que la industria tabacalera generó en las comunidades negras e hispanas, pero que al mismo tiempo estaba preocupada “por cómo la aplicación de la prohibición podría exacerbar los prejuicios raciales dañinos existentes en nuestro sistema policial”.

Pero otros aliados del presidente Biden, a propósito de todo el debate en torno a la prohibición, han sido críticos con el Gobierno federal por frenar una medida que fue prometida desde hace mucho tiempo y al final no se cumplió a meses de que finalice su primer mandato.

La representante demócrata Robin Kelly, que lidera el grupo de expertos en salud del Caucus Negro del Congreso, manifestó su profunda decepción “de que la FDA haya decidido abandonar su plan establecido para prohibir los cigarrillos mentolados… Se trata de un plan de sentido común que podría haber salvado cientos de miles de vidas”.

Según un análisis del WSJ que cita datos oficiales, los cigarrillos mentolados representan más de un tercio de todos los cigarros vendidos en el país cada año y son comprados mayoritariamente por negros e hispanos. El medio reseñó que un 81 % de los fumadores negros y el 51 % de los hispanos consumieron cigarros mentolados en 2020, cifra que empequeñece al 30 % de los fumadores blancos que consumieron estos cigarrillos cuestionados desde hace años por ser más adictivos que los cigarros comunes y también por su promoción comercial entre las minorías negras e hispanas.

Lo cierto es que la prohibición está frenada y por el momento no hay un cronograma para que la Administración Biden revise la decisión, ya que el presidente demócrata ahora mismo se encuentra inmerso en una lucha contra el expresidente Donald Trump por la reelección.