Cuatro días después, detienen a la mujer que mató a una madre delante de sus hijos en Ocala, Florida

Susan Louise Lorincz abrió fuego contra AJ Owens en el rellano de su casa y aseguró que fue en defensa propia.

La Oficina del Sheriff de Marion, Florida, comunicó este martes el arresto de una mujer acusada de disparar a otra mujer de 35 años de edad la semana pasado en Ocala, condado de Marion. Se trata de Susan Louise Lorincz, una mujer de 58 años de edad sobre lo que ahora pesan los cargos de homicidio con arma de fuego, negligencia culpable, lesiones y dos delitos de agresión por la muerte de Ajike "AJ" Owens.

Los hechos sucedieron el pasado viernes cuando Lorincz se enfrentó con Owens por una presunta molestia ocasionada por los hijos de esta última. De acuerdo con la Oficina del Sheriff de Marion, Lorincz se enfureció cuando los hijos de Owens jugaban cerca de su vivienda. En ese momento, Lorincz comenzó a regañar a gritos a los dos menores de edad, de 10 y 12 años. De acuerdo con las declaraciones de un testigo al Sheriff, Lorincz agredió a ambos menores.

Cuando ambos niños acudieron a su madre, esta decidió acercarse a la vivienda de Lorincz. Owens llamó varias veces a la puerta de la vivienda y pidió a Lorincz que saliera fuera. Fue entonces cuando, según la Oficina del Sheriff, Lorincz disparó a través de la puerta y alcanzó a Owens en el pecho. El hijo menor de Owens estaba junto a ella cuando recibió el disparo de Lorincz.

Miembros de la Oficina del Sheriff de Marion acudieron al lugar de los hechos, primero por una llamada que reportaba un allanamiento y después otra patrulla más por el tiroteo. Cuando los ayudantes del sheriff llegaron, encontraron a Owen herida de bala frente a la vivienda de Lorincz. Fue trasladada al hospital, pero murió posteriormente de sus heridas.

Lorincz se aferra a la legítima defensa

No fue detenida hasta este martes. La acusada declaró que hizo uso de su derecho a la legítima defensa. Aseguró a las autoridades que Owens intentó tirar abajo su puerta. Pese a esto, la investigación previa del Sheriff no ofrece indicios que respalden la versión de Lorincz y que establezcan un supuesto válido para el uso de la fuerza letal.

Lorincz corre el peligro de enfrentarse a una pena de 30 años de cárcel por el cargo de homicidio con arma de fuego. En un comunicado, el sheriff Billy Woods declaró que todos los esfuerzos de su Oficina están centrados en este caso.

En la capilla ardiente de Owen, varios miembros de su familia pidieron justicia. Además, también se refirieron al asesinato de Owen como un ataque racista. De acuerdo con el abogado de la familia, Ben Crump, Lorincz presuntamente gritó insultos racistas a Owen y a sus hijos antes de disparar. La Oficina del Sheriff de Marion no confirmó este supuesto.