Cientos de inmigrantes tienen varios días durmiendo en la central de autobuses del aeropuerto de O'Hare en Chicago. Según explican los medios locales, la situación se genera debido a las dificultades de la ciudad para encontrar albergues para los sin papeles.
"Al igual que Nueva York y otras ciudades, Chicago ha tenido dificultades para albergar a los solicitantes de asilo, trasladando lentamente a las personas de espacios temporales a refugios y, en un futuro próximo, tiendas de campaña. Pero el uso de los aeropuertos por parte de Chicago es inusual, ya que ha sido rechazado en otros lugares, y pone de relieve la respuesta desordenada de la ciudad a la crisis. La práctica también ha generado preocupación sobre la seguridad y el trato de las personas", explicó Fox News Chicago.
"La enfermedades se propagan rápidamente"
Algunas de las personas pasaron hasta dos semanas en la terminal hasta ir a la comisaría y que les asignarán un refugio. Se espera que la ciudad inicie un protocolo similar al de Nueva York para habilitar tiendas de campaña que acojan a los ilegales. "Hasta 500 personas han vivido en O'Hare simultáneamente en un espacio mucho más pequeño que una manzana de la ciudad, envuelto por una cortina cerrada con grapas. Sus movimientos son monitoreados por una empresa privada cuyo personal controla quién entra y sale de la cortina", explicó Fox News Chicago.
Las enfermedades se propagan rápidamente. La empresa de personal proporciona primeros auxilios limitados y llama a ambulancias. Un equipo voluntario de médicos visitó una vez durante el verano y sus suministros quedaron diezmados.
Desde que Joe Biden asumió como presidente, se disparó la cantidad de inmigrantes ilegales que ingresaron a Estados Unidos. Por ejemplo, según estadísticas oficiales, durante el 2022 se alcanzó el récord de encuentros con inmigrantes que intentaron cruzar ilegalmente la frontera sur.
