El año 2023 terminó estableciendo un nuevo récord de policías tiroteados en acto de servicio. Según denunció la Orden Fraternal Nacional de Policía, más un agente resultó herido de bala cada 24 horas (378 en total). Estas cifras suponen que desde 2018 estos ataques se han incrementado en un 60%. No obstante, el número de oficiales asesinados durante el curso pasado fue de 46, el menor de los cinco años previos.
The National FOP report on officers shot in 2023 has just been released and the results are horrifying!
378 officers shot, highest number since we started tracking the data.
60% increase in officers shot since 2018.
115 ambush attacks that resulted in 138 officers shot.
46… pic.twitter.com/aR2vOeyi2b
— National Fraternal Order of Police (FOP) (@GLFOP) January 2, 2024
115 emboscadas dejaron 138 agentes heridos de bala
La organización destaca un dato que les preocupa especialmente: la caza al policía. Durante 2023, 138 agentes fueron disparados en 115 emboscadas cuyo único objetivo era atacar a los uniformados. 20 policías perdieron la vida en este tipo de asaltos. Además, muchos de ellos recibieron disparos mientras comían, se encontraban sentados en su puesto e incluso "en cinco casos, señalados y asesinados mientras estaban en su casa o camino de casa". Cabe reseñar que la NFO no incluye las "incontables" ocasiones en las que un oficial es disparado pero no es alcanzado por las balas.
A pesar de que el número de agentes que perdió la vida en acto de servicio es el menor de los últimos seis años, los agentes heridos por bala han ido creciendo año tras año desde 2018. En este año, se registraron 237 que pasaron a 293 en 2019. Desde 2020 la cifra no ha bajado de 300: 312 en dicho curso, 346 en 2021, 331 (un leve receso) en 2022 y los 378 del pasado año.
Las mejoras médicas y tecnológicas redujeron la letalidad de los ataques
El presidente de la organización policial, Patrick Yoes, destacó que "afortunadamente, gracias a las espectaculares mejoras de la ciencia médica traumatológica y la tecnología antibalística, la letalidad de estos ataques se ha reducido y sólo 46 de los agentes tiroteados en acto de servicio perdieron la vida". No obstante, Yoes expresó su pesar porque el número de ataques no parece tener techo:
El año pasado, más de 330 policías fueron tiroteados en acto de servicio. Con la pandemia del COVID-19 a nuestras espaldas y después de que tantos estadounidenses hayan visto las trágicas consecuencias del movimiento de desfinanciación de la policía, esperábamos que estas cifras marcaran un hito. Nos equivocamos.
2021, el año con más agentes asesinados
Sin duda el año más negro fue 2021, en el que 64 agentes fueron asesinados a balazos. En 2022, con 62, también se superaron los 60 fallecidos, mientras que el resto de cursos están más cerca de los 50: 53 en 2018, 50 en 2019, 47 en 2020 y los 46 del pasado año.
Por estados, Texas es el que registró más ataques (39) contra las fuerzas del orden. Le siguen Pensilvania (25), California (22) y Tennesse (21). Florida y Georgia sufrieron 17 ataques de este tipo. Curiosamente, Washington DC, a pesar de su alta tasa de criminalidad es una de las que menos agentes resultaron heridos de bala (2) de todo el país.
