Brittney Griner, estrella del baloncesto detenida en Rusia, se ha declarado culpable en el juicio por contrabando de tráfico de drogas. La audiencia terminó y la deportista estadounidense, quien también ha sido ganadora de medallas olímpicas, salió del tribunal de Khimki sin hacer comentarios a la prensa.
Hace unos días el Departamento de Estado de EEUU calificó su detención de injusta. Este miércoles, la Casa Blanca dio a conocer que el presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris conversaron vía telefónica con la esposa de Griner, Cherelle Griner. La campeona olímpica juega en Rusia durante la temporada baja de la WNBA, en las filas del equipo UMMC Ekaterinburg, desde el 2014.
Detenida antes de la guerra en Ucrania
Griner fue arrestada el 17 de febrero en un aeropuerto de Moscú, tan sólo una semana antes de que Rusia realizara la invasión a Ucrania. Trascendió a los medios internacionales que presuntamente portaba aceite de cannabis en su equipaje. Se le acusó de realizar contrabando con la sustancia estupefaciente. Ella finalmente admitió los hechos este jueves, pero aseguró que no tenía intención de delinquir.
De acuerdo con la Agencia Rusa de Información Novosti (RIA), Griner le expresó al tribunal que no tenía la intención de llevar en su equipaje aceite de hachís. Asegura que todo se debe a un error porque "empacó a toda prisa".
Hace unas días la deportista le escribió una carta al presidente Joe Biden pidiéndole que "por favor, haga todo lo que pueda para llevarnos a casa...Voté por primera vez en 2020 y voté por usted. Creo en usted". Aunque presuntamente el mandatario le expresó a la esposa de Grinner, que trabajaba para lograr la libertad de la medallista, la reciente declaración de culpabilidad podría complicar su promesa.
