Una mujer denuncia al Centro Médico de la Universidad de Nebraska por extirparle ambos pechos para intentar convertirle en hombre cuando tenía 16 años

Luka Hein, arrepentida de haberse sometido a la operación, critica que los doctores aprovecharon su confuso estado mental en esos momentos para engañarla con falsas garantías.

Luka Hein, una mujer arrepentida de haberse sometido a un proceso de cambio de sexo, que incluyó una doble mastectomía cuando tenía 16 años, demandó al Centro Médico de la Universidad de Nebraska (UNMC, por sus siglas en inglés) por manipularla para someterse a la intervención. Hein, representada por la organización Center for American Liberty, señala en el escrito que su tratamiento le "robó" su "feminidad.

Hein sufrió el acoso sexual online de un hombre mayor que ella

En la denuncia, Hein explica que los médicos le presionaron para operarse con apenas dos consultas y aprovechando la confusión de la entonces menor por su difícil infancia, con desórdenes psicológicos y confusión. Hein, además, sufrió el acoso online de un hombre mayor que ella cuando tenía 15 años que la engañó para que el mandara fotos de ella sexualmente explícitas. Cuando se negó a enviarle más, el hombre llegó a amenazarla. La adolescente, aterrorizada, denunció los hechos a la policía. Lo ocurrido, sumado a la dura investigación de los cuerpos de la ley dañaron aún más la salud mental de la menor, que tuvo que ser ingresada en el programa de cuidados intensivos parciales psiquiátricos y ser medicada.

"Se preguntó si sería mejor no tener pechos"

Con su salud mental tan resentida, Hein comenzó a pensar que sus problemas se solucionarían si se extirpaba los senos y se convertía en un chico.  "Luka se preguntó si sería mejor no tener pechos. Empezó a investigar sobre sexualidad en Internet y encontró influencers transgénero que ensalzaban las virtudes de las hormonas y la cirugía. pidió una faja para disimular su pecho, se trasladó de una escuela sólo para chicas, y cambió su nombre. Empezó a identificarse como varón y comunicó a sus profesionales de salud mental y a sus padres que era transgénero". Acudieron a una terapeuta,  Megan Smith-Sallan, que les remitió a la UNMC, con quien colaboraba.

Estaba atravesando la época más oscura y caótica de mi vida y, en lugar de darme la ayuda que necesitaba, estos médicos convirtieron ese caos en realidad. Me convencieron de que me sometiera a una intervención médica de la que no entendía las consecuencias a largo plazo.

Falsas garantías

En un comunicado, el Center of America Liberty acusa a la terapeuta y al resto de médicos que participó en el proceso de Luka de engañar a la familia, con falsas garantías y sin informarles de los efectos secundarios y los riesgos.

Los médicos del UNMC engañaron a Luka y a sus padres con falsas promesas, afirmando que si Luka no se sometía a la extirpación de sus pechos, se quitaría la vida, a pesar de las pruebas médicas que demostraban lo contrario. El UNMC también ocultó estudios científicos que no respaldan las "transiciones" quirúrgicas en menores, incluidos estudios que demuestran que las cirugías transgénero aumentan la suicidalidad y la morbilidad psiquiátrica.

"Luka es ahora una huérfana médica"

Según indica la denuncia, "debido a las acciones de los demandados, Luka es ahora una huérfana médica. Después de haber sido sometida a una cirugía irreversible y una cascada de cuatro años de testosterona, los médicos simplemente no tienen idea ahora de cómo ayudarla. Habiéndola roto, los demandados no tienen ni idea de cómo arreglarla". Por ello, la demandante "reclama los siguientes daños y perjuicios:

a. Dolor físico y sufrimiento mental, pasado y futuro;
b. Gastos médicos, pasados y futuros;
c. Deterioro permanente de su capacidad de ganancia;
d. Inconvenientes y pérdida del disfrute de la vida; y
e. Cicatrices, lesiones e incapacidad permanentes.