Ron DeSantis promete reducir el precio de la gasolina a 2 dólares por galón si es elegido presidente

El aspirante por el GOP a la Casa Blanca y gobernador de Florida anunció que aplicará una serie de reformas energéticas para "revertir las políticas dañinas de Joe Biden y su 'Green New Deal'".

El precandidato presidencial por el Partido Republicano y gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció que de llegar a la Casa Blanca en 2024 pondrá en marcha un programa que tiene como uno de sus objetivos bajar los precios de los combustibles -en especial la gasolina- hasta llegar al costo de 2 dólares por galón para el año 2025.

DeSantis anunció su promesa presidencial en un discurso en Midland (Texas), en el que declaró: "Como su presidente, restableceré nuestra libertad para abastecernos de combustible a partir del 20 de enero de 2025 (...) Me aseguraré de que Estados Unidos de América sea el mayor productor de energía del mundo".

En un comunicado, DeSantis manifestó que pretende "revertir las políticas dañinas de Joe Biden Green New Deal que perjudican a los estadounidenses y fortalecen a los adversarios":

Como Presidente, me centraré en la reducción de los precios del gas y los costos de la energía (...) Desataremos el dominio de la energía estadounidense como una forma de detener la inflación y lograr $2 de gasolina en 2025 (...) Revertiremos el declive estadounidense cambiando la agenda energética de Biden de America last, eliminando la dependencia energética de naciones hostiles y anteponiendo los intereses económicos de los estadounidenses a la agenda ideológica de la izquierda radical.

El plan energético de DeSantis

El plan del gobernador de Florida sale a la luz en un momento en el que el costo la gasolina se encuentra en máximos desde el año pasado. Según la Asociación Estadounidense del Automóvil, el precio medio nacional de la gasolina regular es de alrededor de 3,88 dólares por galón.

Sin embargo, bajar el costo de los combustibles es sólo un objetivo del programa que DeSantis quiere poner en marcha si llega a la Casa Blanca. El gobernador también planea realizar una serie de reformas energéticas a las políticas actuales que -según sus palabras-  han incrementado los precios de la energía. Entre las medidas:

Recuperar el dominio energético estadounidense; Salvar el automóvil estadounidense; Anteponer la evidencia a la ideología; Reformar los permisos medioambientales y acabar con el "lawfare" ecológico;  Poner en marcha la explotación de los yacimientos minerales críticos y del suelo federal;  Construir la red energética más eficiente, asequible y fiable del mundo.