Hay tensión en el Gobierno del Reino Unido. Y es que se ha generado una controversia luego de que se conociera que el primer ministro, Rishi Sunak, planea hacer público el nombre del nuevo embajador ante Estados Unidos. El asesor de seguridad nacional Tim Barrow sería el nuevo representante en Washington, D.C., según conoció Telegraph.
"Downing Street anunciará el martes que Sir Tim, exembajador en Ucrania, Rusia y la UE, será enviado a la embajada británica en Washington a finales de este año. El puesto, uno de los más prestigiosos del Gobierno, tiene un peso aún mayor antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre, donde Donald Trump podría ganar un segundo mandato en la Casa Blanca", reseñó Telegraph.
De igual manera, se supo que el secretario de Asuntos Exteriores, David Cameron, propuso que se retrasara el nombramiento hasta después de las elecciones generales, pero su consejo no fue tomado por el primer ministro.
"Se entiende que Lord Cameron, el Ministro de Asuntos Exteriores, sugirió que el Gobierno esperara hasta después de las próximas elecciones generales antes de anunciar su reemplazo. Sin embargo, su consejo fue desestimado por Sunak, de quien se dice que quería recompensar a Sir Tim por su trabajo en Downing Street", explicó Telegraph.
El próximo nombramiento ha sido un tema de debate en Washington y Whitehall durante algún tiempo, después de que a la actual embajadora, Dame Karen Pierce, se le ampliara su mandato habitual de cuatro años debido a la pandemia (...) El anuncio también abre el puesto de asesor de seguridad nacional, uno de los puestos de mayor rango en la administración pública del Gobierno.
El adelanto del nombre del posible nuevo embajador también generó la reacción de los laboristas. Una fuente aseguró al Financial Times que esperan reconsiderar el nombramiento si gana las próximas elecciones generales. No lo harían por estar inconformes con que sea Sir Tim Barrow el titular, sino más bien por creer que tenían derecho a ser consultados para hacer el nombramiento.
“Al apresurarse innecesariamente a realizar nombramientos diplomáticos vitales tan cerca de las elecciones del Reino Unido y de Estados Unidos, los conservadores están anteponiendo una vez más los intereses de su partido al interés nacional”, dijo el funcionario al Financial Times.
