La Organización de las Naciones Unidas (ONU) cree que Corea del Norte ha activado por primera vez un nuevo reactor nuclear -el segundo del que dispondría- en la central de Yongbyon, localizada al norte de la capital, Pyongyang. Podría ser una nueva muestra del afán del líder supremo norcoreano, Kim Jong-un, por potenciar el alcance -mayoritariamente, armamentístico- que le puede dar este tipo de energía a su país.
Concretamente, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (IAEA), organismo integrado en la estructura de la ONU, descubrió que los niveles de actividad en el reactor de agua ligera (LWR) de la central de Yongbyon se habían intensificado, razón que le llevó a pensar que el régimen norcoreano había puesto en marcha el reactor.
El director general de la IAEA, Rafael Mariano Grossi, emitió un comunicado explicando por qué la agencia entiende que Kim Jong-un ha decidido activar su segundo reactor nuclear, pese a que no puede confirmarlo debido al veto que tiene para entrar en la central:
Observaciones más recientes indican que esta descarga de agua está caliente, lo que también es coherente con la puesta en marcha en curso del LWR, un proceso que lleva cierto tiempo para cualquier reactor nuevo. Sin embargo, el vertido de agua caliente es indicativo de que el reactor ha alcanzado la criticidad. Sigue siendo cierto que, sin acceso a la instalación, la Agencia no puede confirmar su estado operativo.
IAEA Director General @rafaelmgrossi statement on recent developments in the DPRK’s nuclear programme.https://t.co/mS9i5FPUVV pic.twitter.com/jxVAEQlTwk
— IAEA - International Atomic Energy Agency ⚛️ (@iaeaorg) December 21, 2023
Inquietud por la posible activación
Grossi continuó su escrito afirmando que la ONU está inquieta por este posible movimiento del líder supremo de Corea del Norte, debido a la capacidad operativa que tendría este reactor. "El LWR, como cualquier reactor nuclear, puede producir plutonio en su combustible irradiado, que puede separarse durante el reprocesamiento, por lo que es motivo de preocupación", añadió.
Respecto a la seguridad, el director general aseguró que "no disponemos de información suficiente para hacer una evaluación", fruto de su impedimento a acceder a la central nuclear. Además, advirtió al régimen comunista de que la puesta en marcha de este reactor "constituye una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU", concluyendo con que Corea del Norte "cumpla plenamente sus obligaciones en virtud de las resoluciones del Consejo de Seguridad".
