Musk retrocede y se compromete a acatar las órdenes del tribunal brasileño sobre el bloqueo de cuentas en X

El magnate había afirmado que levantaría todas las restricciones impuestas por el juez, incluso si eso significaba tener que cerrar las operaciones de la oficina en Brasil.

La red social de Elon Musk, X, cambió de postura y optó por no desafiar la decisión de la Justicia brasileña que exigía el bloqueo de cuentas cercanas al expresidente Jair Bolsonaro. Los representantes legales de la plataforma aseguraron que cumplirán con todas las órdenes emitidas por el tribunal o el máximo tribunal electoral de Brasil.

Los abogados de la red social le enviaron una carta al juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes, informando que X acatará todos los requerimientos judiciales.

Este cambio de postura se produce después de que Musk expresara su intención de revocar todas las restricciones impuestas por el juez, argumentando que son inconstitucionales y solicitando la dimisión de Moraes.

En aquel momento, Musk declaró: “Estamos levantando todas las restricciones (…) Como resultado, probablemente perderemos todos los ingresos en Brasil y tendremos que cerrar nuestra oficina allí. Pero los principios importan más que las ganancias”.

En respuesta a la declaración de Musk, Moraes inició una investigación contra el magnate por "obstrucción a la justicia, pertenencia a una organización criminal e incitación al crimen", y se le advirtió que enfrentaría una multa de 100.000 reales (aproximadamente 20.000 dólares) diarios por cada perfil restablecido.

Twitter Files de Brasil

El periodista Michael Shellenberger desató una polémica el pasado 3 de abril al publicar en Twitter un hilo que tituló como las Twitter Files de Brasil. En él, Shellenberger denunció una “amplia represión de la libertad de expresión” impulsada por el juez del Tribunal Supremo, Alexandre de Moraes.

Según Shellenberger, Moraes ha encarcelado a personas sin juicio previo por publicaciones en redes sociales, ha exigido la expulsión de usuarios de dichas plataformas y ha ordenado la censura de publicaciones específicas sin otorgar a los usuarios ningún derecho de apelación ni acceso a las pruebas en su contra. Todo esto, asegura el periodista, con el propósito de favorecer al expresidente Lula da Silva y su partido.

La situación cobró más relevancia, cuando tanto X como Shellenberger denunciaron nuevas demandas de la Justicia brasileña para censurar más cuentas.

"Se nos prohíbe decir qué tribunal o juez emitió la orden, o por qué motivos. Se nos prohíbe decir qué cuentas se ven afectadas. Se nos amenaza con multas diarias si no cumplimos", expresó X en un comunicado oficial.

Por su parte, Shellenberger lamentó que Brasil esté "al borde del abismo" y acusó directamente al presidente Lula de participar en un impulso hacia el totalitarismo.