México: el Congreso rechaza la reforma electoral de AMLO, pero seguirá adelante por otra vía

La propuesta obtuvo 269 votos a favor y 225 en contra, pero necesitaba el respaldo de dos tercios de la Cámara de Diputados.

La Cámara de Diputados de México rechazó el martes la polémica reforma electoral que propuso Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en abril. La propuesta obtuvo 269 votos a favor y 225 en contra, pero no pudo seguir adelante al no contar con los dos tercios necesarios para ello.

La reforma, que según algunos críticos podía acabar con la independencia de las autoridades, pretendía reemplazar al organismo electoral autónomo del país, el Instituto Nacional Electoral (INE) por otro de menor capacidad pero con más autoridad.

Otros puntos de la reforma proponían que sus autoridades sean elegidas mediante un sistema de sufragio universal; recortar la financiación a los partidos políticos o reducir el número de diputados y senadores plurinominales así como implementar el voto electrónico tanto dentro como fuera de México.

Reducir el coste del sistema, objetivo declarado de la reforma de AMLO

El objetivo que tiene el partido de Morena y aquellos que apoyan al gobierno de López Obrador con esta reforma era abaratar el coste del sistema político mexicano en unos 24.000 millones de pesos mexicanos (1.200 millones de dólares) así como eliminar el fraude electoral, como aseguró AMLO al anunciar la propuesta en su página web:

Que dejemos atrás de una vez y para siempre, la historia de fraudes. Ese es nuestro propósito. (…) No hay la intención de que se imponga un partido único. Lo que queremos es que haya una auténtica democracia en el país, que se terminen con los fraudes electorales, que sea el pueblo el que elija libremente a sus representantes.

Manifestaciones multitudinarias en contra de la reforma

Sin embargo, la iniciativa tiene varios puntos con los que gran parte de la ciudadanía no está de acuerdo. Esto les llevó a organizar marchas tanto en la Ciudad de México como en otra treintena de ciudades para manifestar su postura en contra a la propuesta que, según los partidos de la oposición, es una estrategia cuyo único fin es eliminar al INE.

Las manifestaciones fueron convocadas, según cuenta CNN, por unas 50 organizaciones civiles, partidos políticos y legisladores de la oposición y, en ellas, los partidos PAN, PRD y PRI anunciaron que se postularían en contra del proyecto.

El presidente mexicano, viendo la afluencia que tenían las propuestas, aseguró que "la supuesta agresión al INE no tiene fundamento" y acusó a los manifestantes de ir "en contra de la transformación" que está ocurriendo en el país: "Fue muy importante la marcha. Fue como una especie de striptease político y público del count conservadurismo en México", afirmó el día siguiente a las manifestaciones.

También calificó la protesta como "racista" y "clasista" y anunció que tanto él como su partido de Morena, que cuenta con una amplia mayoría en el Congreso, tenían un "plan B" en caso de que la iniciativa no siguiese adelante.

El "plan B" de López Obrador

Esta segunda alternativa, que el Congreso aprobó hace unas horas, únicamente modificaría a las leyes secundarias sin afectar a la Constitución, como se plantea en la reforma original. Esto implica que no sería necesaria la aprobación de dos tercios para seguir adelante, sino que les bastaría con contar con una mayoría simple que estuviese a favor del "plan B".

El nuevo intento, explicado en un documento de más de 300 páginas, incluye una nueva batería de reformas que López Obrador presentó tras las manifestaciones de noviembre: "Se establecen límites a las acciones arbitrarias tanto del INE como del TEPJF [el Tribunal Electoral] respecto de interpretaciones ajenas a la ley que han limitado la libertad de expresión, los derechos político-electorales, la autodeterminación de los partidos políticos, entre otros", se lee en el escrito al que tuvo acceso el periódico El País.

Un plan que, al igual que la reforma electoral original, cuenta con varios críticos en contra como el consejero electoral del INE, Ciro Murayama, o el presidente de Acción Nacional, Markos Cortés, que se manifestaron en contra de la iniciativa en sus redes sociales: