La Justicia invalidó seis de los 41 cargos por los que se acusa a Donald Trump y a otros 18 investigados de interferencia electoral en Georgia durante las últimas votaciones presidenciales de 2020.
El motivo del juez del condado de Fulton, Scott McAfee, instructor del caso, es que los demandantes -liderados por el fiscal del condado de Fulton, Fani Willis- no dieron suficientes argumentos jurídicos complementarios para buscar el procesamiento de los acusados por estos seis cargos.
"La preocupación del Tribunal no es tanto que el Estado no haya alegado una conducta suficiente de los acusados - de hecho, ha alegado una abundancia. Sin embargo, la falta de detalles en relación con un elemento jurídico esencial es, en la opinión de quien suscribe, fatal", dijo el juez McAfee. "Tal y como están redactados, estos seis cargos contienen todos los elementos esenciales de los delitos, pero no alegan detalles suficientes sobre la naturaleza de su comisión, es decir, el delito subyacente solicitado".
Además, el juez McAfee afirmó que los acusados no disponen de la información necesaria "para sus defensas inteligentemente". Estos seis cargos retirados están vinculados a las denuncias recibidas por Trump y el resto de acusados que presuntamente trataron de obligar a los funcionarios de Georgia a violar su juramento. Pese a ello, el instructor del caso afirmó que esta retirada de cargos "no significa que se desestime toda la acusación".
En declaraciones al Washington Examiner, Steve Sadow, abogado de Trump, aplaudió la decisión judicial por ser "una aplicación correcta de la ley" y pidió que se anularan los otros 35 cargos:
El fallo es una aplicación correcta de la ley, ya que la fiscalía no hizo alegaciones específicas de ninguna supuesta irregularidad en esos cargos. Toda la acusación contra el presidente Trump es política, constituye una interferencia electoral y debe ser desestimada.
