Irán: 17 horas de combate con los separatistas dejan al menos 27 muertos

Los terroristas capturaron un cuartel de las fuerzas armadas iraníes, que tardaron toda una noche en recuperarlo después de una costosa operación militar.

Un episodio de combates entre las fuerzas iraníes y los separatistas islámicos del Beluchistán dejan al menos 27 muertos en Irán. De acuerdo con los medios iraníes, grupos armados de insurgentes asaltaron dos cuarteles de la Guardia Fronteriza y de la Guardia Revolucionaria con éxito.

El ataque fue llevado a cabo por el grupo Jaish ul Adl, quien el pasado miércoles ocupó dos bases militares, en Chanbahar y en Rask. De acuerdo con la agencia oficial de noticias iraní, IRNA, el ataque fue simultáneo y coordinado.

Para retomar las bases militares ocupadas, las fuerzas gubernamentales iraníes lanzaron un asalto contra las posiciones tomadas por los insurgentes. Tardaron alrededor de 17 horas en alcanzar su objetivo de expulsar a los terroristas de Jaish ul Adl de las bases.

El coste humano también fue elevado. Después de toda una noche de combates del miércoles al jueves, el Gobierno iraní dio parte de once bajas entre sus fuerzas armadas. Del lado de los separatistas habría al menos 16 muertos, lo que asciende el total a 27 personas fallecidas en este episodio. De acuerdo con Reuters, que cita una televisión nacional, hubo otras diez personas heridas.

El ataque de esta semana es el más importante llevado a cabo por el grupo Jaish ul Adl en lo que va de año. En los meses anteriores, el grupo terrorista ha conducido escaramuzas contra las fuerzas de Irán en la región sureña de Beluchistan. Desde 2022, el grupo separatista anunció que aumentaría la intensidad de sus operaciones armadas contra el régimen islamista.

Junto con Pakistán, Irán eleva, por tanto, sus medidas de seguridad y también sus medios para luchar contra los elementos del movimiento separatista. El Gobierno iraní lanzó en varias ocasiones misiles contra posiciones de los separatistas desde enero de 2024. Ataques similares a los que Pakistán también llevó a cabo, pese a las reticencias de Irán.

En enero, las operaciones armadas de ambos países contra los separatistas provocaron un episodio de tensión diplomática. La región de Beluchistán, reclamada por Jaish ul Adl, se encuentra repartida entre las fronteras de Irán, Pakistán y Afganistán. Ambos Gobiernos se afearon llevar a cabo ataques aéreos en zonas a las que sus respectivas fuerzas armadas no tenían el permiso para actuar.