¿Georgia, Arizona y ahora Carolina del Norte? Joe Biden apunta sus cañones al Tar heel state para 2024

El presidente y su campaña apostarán fuerte para ganar allí en las próximas elecciones, algo que el partido no consigue desde el 2008 con Barack Obama.

En los días posteriores a las elecciones presidenciales del 2020, Pennsylvania, Arizona, Wisconsin, Georgia y Carolina del Norte seguían con resultado incierto. Cuando todos los votos fueron contabilizados, los primeros cuatro estados fueron para Joe Biden mientras que el último fue a parar a la columna de Donald Trump. Cuatro años después y con una revancha entre ambos como un escenario más que probable, el demócrata tiene la intención de todos y cada uno de ellos.

La campaña del presidente apuntó sus cañones directamente contra el Tar heel state, el cual perdió en 2020 por apenas 1,34 puntos porcentuales, lo mismo que decir 74.00 votos. Fue la contienda que más le costó ganar al republicano en los últimos comicios. 

Carolina del Norte fue históricamente demócrata hasta 1968, cuando la victoria de Richard Nixon comenzó la tendencia republicana que se mantiene hasta la actualidad. Por ejemplo, hasta el triunfo de Tricky Dick frente a Humphrey, el Partido Demócrata registraba 28 victorias contra 6 derrotas en las elecciones presidenciales. 

De allí para adelante, el marcador es de 12 derrotas y apenas dos victorias, las de Jimmy Carter en 1976 y Barack Obama en 2008. Sin embargo, Biden tiene de donde aferrarse para suponer que podría ser competitivo en 2024.

Joe Biden.
Joe Biden perdió Carolina del Norte por 1,34 puntos en las elecciones presidenciales del 2020.  Cordon Press.

Resulta que su derrota en 2020 fue la mejor performance de un demócrata perdedor en Carolina del Norte. Además, en las elecciones de medio término del 2022, en teoría un año de Ola Roja, Ted Budd (R) superó a Cheri Beasley (D) por 3,2 puntos en la carrera por el Senado, una disminución del 50 % en el margen de victoria con respecto al del 2016.

La campaña de Joe Biden observa una tendencia positiva a su favor, alimentada por la discusión sobre el aborto y el peso de Trump en el ticket, sumado al crecimiento demográfico en las grandes ciudades y los suburbios

"Creo que el camino hacia la reelección pasará esta vez por Carolina del Norte. Y nos anima el temprano compromiso de la campaña (de Biden) con nuestro estado. Está bastante claro que han decidido que Carolina del Norte va a ser uno de sus estados objetivo”, le confesó a POLITICO el gobernador Roy Cooper (D), además miembro del consejo asesor del presidente a nivel nacional.

Precisamente, Cooper es la prueba cabal que la campaña de Biden utilizará para creer que el Tar Heel State puede volver a elegir a un demócrata para presidente. El actual gobernador fue elegido en 2016 y en 2020. 

“Le dije al presidente que esta inversión va a ser fundamental para su reelección, y que creo que podemos ganar este estado para él", agregó.

Joe Biden en San Diego, Estados Unidos en marzo de 2023.
Desde la campaña de Biden creen el Partido Republicano no tiene chances de vencer al presidente sin Carolina del Norte. Cordon Press.

En la misma línea optimista se mostró Kevin Muñoz, portavoz de la campaña del “esposo de Jill”, como él mismo se describe.

"El presidente Biden y el vicepresidente Harris tienen un sólido historial que resuena entre los habitantes de Carolina del Norte y movilizará a los votantes que necesitamos para ganar en 2024, incluyendo la creación de miles de puestos de trabajo, la reducción de los costes para las familias y la lucha contra las prohibiciones del aborto de los extremistas MAGA", expresó.

"Esperamos plenamente que Carolina del Norte sea competitiva, y planeamos llevar a cabo una campaña agresiva y ganadora que se base en nuestras importantes inversiones en todo el estado”, sumó. 

Además de los fondos otorgados por el DNC, la convicción de los grandes donantes será fundamental para intentar derrotar al candidato republicano, que por supuesto parte como favorito.

De acuerdo con las encuestas difundidas hasta el momento, tanto Trump como DeSantis se impondrían frente a Biden, aunque el presidente supo liderar sondeos previos.

A pesar de la especulación y el entusiasmo por parte de la campaña y líderes locales, la estrategia quedará al descubierto en los próximos meses, cuando el Comité Nacional Demócrata (DNC) decida cuánto dinero invertirá en cada estado. 

“Prender fuego el dinero”

Del otro lado del pasillo, el Partido Republicano está más que contento de que los demócratas se sientan confiados en sus posibilidades de ganar en Carolina del Norte, dado que las inversiones son un juego de suma cero. En otras palabras, la DNC y otros grandes donantes estarían invirtiendo en este estado para dejar de invertir en otros.

“Estamos entusiasmados de que la campaña de Biden esté invirtiendo en Carolina del Norte, ya que los republicanos siempre alientan a los demócratas a prender fuego al dinero en lugares donde los votantes los han rechazado sólidamente ciclo tras ciclo”, manifestó en un comunicado Emma Vaughan, portavoz del Comité Nacional Republicano (RNC). 

Su teoría es la siguiente: es mejor que los demócratas despilfarren dinero en un estado que creen que pueden ganar pero que al final verá victorioso al candidato del GOP, dado que así tendrán menos dinero en otros estados más competitivos.