La primera misión privada estadounidense con destino a la Luna despega con éxito
El Vulcan Centaur de United Launch Alliance deberá aterrizar en el satélite a mediados de febrero y lleva una carga con restos humanos del creador de 'Star Trek', además de un bitcoin.
La primera misión espacial estadounidense en cincuenta años con misión de aterrizar en la Luna despegó con éxito este lunes desde Cabo Cañaveral, Florida. Se trata también de la primera iniciativa privada con este fin. En colaboración con la NASA, United Launch Alliance (ULA) es la responsable de llevar a cabo este hito.
ULA se trata de una unión a partes iguales entre Lockheed Martin y Boeing, dos de los mayores empresas de defensa y aeroespacial de la nación. Su misión lanzada con éxito este lunes cuenta con el cohete Vulcan Centaur, que carga con el módulo Peregrine, un rover lunar desarrollado por Astrobotics, que deberá recorrer varias zonas de la Luna con el objetivo de recabar varias muestras y tomar análisis. Estos trabajos servirán para una futura misión tripulada a la Luna, que sería la primera desde el Apolo XI.
Si todo sigue según lo previsto, Peregrine debería alunizar en la zona conocida como Sinus Viscositatis el día 23 de febrero. Peregrine no va vacío. En su interior, el módulo transporta una carga simbólica a la Luna. Se tratan de los restos humanos de dos escritores de ciencia ficción, Gene Roddenberry y Arthur Clarke. Roddenberry fue el creador de la saga de Star Trek y Clarke es el coautor de 2001: Odisea del espacio. Junto a esto, Peregrine también lleva un bitcoin físico, una caja de zapatos construido por la Universidad Carnegie Mellon y un perro, también cremado.
Sacrilegio para la nación Navajo
Pese al claro avance que supone para la ciencia, la carga que transporta Peregrina suscitó polémica en Estados Unidos. Poder llevar una carga desde la Tierra hasta la Luna es una capacidad importante para las últimas misiones lunares. La última misión que logró despegar con éxito y con destino al polo sur lunar, la de India, también llevó una carga.
Pero los representantes de la nación indígena Navajo no tuvieron en buena consideración el detalle de los responsables de United Launch Alliance. Para los navajos, la Luna ocupa un lugar sagrado en sus tradiciones. De acuerdo con el líder de la nación, Buu Nygren, colocar los restos humanos de los dos escritores en el satélite viene a violar las tradiciones navajo.
Charles M. Chafer, CEO de Celestis, la empresa dedicada a enviar restos cremados al espacio como forma de conmemoración, aseguró a USA Today: "Ninguna religión individual puede o debe dictar si una misión espacial debe ser aprobada... no dejamos y nunca hemos dejado que las creencias religiosas dicten los esfuerzos espaciales de la humanidad".
No es la primera vez que la nación Navajo se opone a una aventura especial similar. Ya lo hizo en 1998, cuando la NASA envió a la Luna las cenizas del geólogo planetario Eugene M. Shoemaker.
Problemas en vuelo
El módulo Peregrine de Astrobotics reportó algunos problemas técnicos después de separarse del cohete Vulcan Centaur. En una actualización que ofreció la compañía unas diez horas después del depegue exitoso de la misión, se informó de una perdida crítica de combustible.
Primero se reportó de un problema con el sistema de propulsores y una pérdida de conexión entre los operadores sen Tierra y el módulo en vuelo espacial. Al recuperarse la señal, se supo de esta pérdida importante de combustible. La compañía aseguró que los problemas son serios y que será necesario estudiar cuales son las nuevas prioridades de la misión, teniendo en cuenta las nuevas capacidades limitadas del módulo.