La Fiscalía de Nueva York continuará el caso contra Donald Trump por fraude civil
El presidente electo había pedido a la fiscal general Letitia James que siguiera los pasos de Jack Smith y abandonara la demanda en su contra, por la que podría tener que pagar más de 454 millones de dólares.
La Fiscalía de Nueva York informó este martes que hará oídos sordos al pedido de Donald Trump de descartar un caso por fraude civil en su contra. Así lo notificó Judith Vale, fiscal general adjunta, en una carta a John Sauer, abogado del republicano y su nominado a procurador general de los Estados Unidos.
A fines de noviembre, Sauer escribió a la fiscal general Letitia James solicitándole que desestimara la causa para "curar" las heridas de la polarización política. "El presidente Trump ha pedido que se ponga fin a la lucha partidista de nuestra nación y que las facciones en pugna unan sus fuerzas por el bien mayor del país", señaló el abogado, como reportó entonces VOZ. "Este llamado a la unidad se extiende a la embestida legal contra él y su familia que permeó el ciclo electoral más reciente".
Por aquel caso, Trump recibió una condena por 454 millones de dólares. Su equipo legal apeló y está a la espera del resultado. El magistrado lo encontró culpable de conspirar para inflar su patrimonio con el objetivo de obtener beneficios fiscales y de seguros. En total, todos los acusados, entre ellos Donald Trump JR y Eric Trump, acumulan una sanción de más de 464 millones de dólares.
"La inminente toma de posesión del Sr. Trump como el próximo presidente de los Estados Unidos no tiene ninguna relación con la resolución de la apelación", escribió la fiscal Vale. También negó que la demanda tuviese motivación política alguna: "Se interpuso tras una investigación de varios años de la oficina, y múltiples tribunales han rechazado las alegaciones de que la investigación o la acción se iniciaron de otra forma que no fuera de buena fe".
Vale hizo referencia a la inmunidad presidencial, descartando que abarcase las acciones juzgadas en el caso: "La sentencia no se refiere a ninguna conducta relacionada con el primer mandato del señor Trump como presidente". En un fallo en julio, la Corte Suprema dictaminó que un presidente no podía ser juzgado por actos vinculados con su actividad oficial. Sin embargo, Vale puntualizó que "los presidentes no gozan de inmunidad frente a demandas civiles derivadas de conductas no oficiales".
Asimismo, sostuvo que el proceso de apelación no estorbará el segundo mandato de Trump, ya que se encuentra en sus últimas instancias y será llevado adelante por sus abogados, y distinguió el caso de otros que los fiscales decidieron abandonar tras la victoria del republicano en noviembre, alegando que este caso civil tenía poco que ver con los casos penales contra el presidente electo.
Tras las elecciones, el fiscal especial Jack Smith pidió que sus dos casos contra el republicano sean sobreseídos. Así, el panorama judicial del presidente electo se fue despejando. Con esta respuesta desde Nueva York, las grandes incógnitas son qué sucederá en la misma ciudad con la condena en el caso de Stormy Daniels y en Georgia, con la causa por interferencia electoral encabezada por Fani Willis.
James llegó a una conclusión distinta. Días después de las elecciones, prometió hacer la guerra a Trump: "No esperábamos este resultado, pero estamos preparados para responder. Mi oficina se ha estado preparando durante varios meses porque hemos estado aquí antes". La carta de Vale puede ser una de las primeras ofensivas.