La diferencia en recaudación de fondos preocupa a los republicanos del Congreso: "Perderemos escaños que podríamos ganar"
En el caso del Senado, el GOP podría ganar arrebatarle a los demócratas hasta ocho asientos: Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Nevada, Arizona, Ohio, Montana y Virginia Occidental.
El Partido Republicano espera recuperar el Senado en las elecciones de noviembre, donde enfrentará un mapa mucho más favorable que los demócratas. Este año se renuevan los senadores "clase 1", grupo en el que el GOP tiene ocho estados en la mira: Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Nevada, Arizona, Ohio, Montana y Virginia Occidental. Sin embargo, la esperanza de recuperar la Casa Blanca con una mayoría más que interesante en la Cámara Alta enfrenta un obstáculo un tanto fuerte: la recaudación de fondos.
Resulta que seis de los candidatos republicanos en los mencionados estados están muy abajo en comparación con sus rivales demócratas en este aspecto, dado que los megadonantes demócratas han estado desembolsando sumas de dinero suculentas en cada una de estas carreras. Por supuesto, esta situación no pasa desapercibida entre los republicanos.
“En este momento los multimillonarios de izquierda están gastando muchísimo más que nosotros: eso es lo que me mantiene despierto por las noches”, alertó en la Convención Nacional Republicana el senador Steve Daines, actual presidente del Comité Senatorial Republicano Nacional (NRSC), cargo que implica ser el encargado de de que más republicanos sean electos para el Senado y que los que están mantengan su asiento.
"Perderemos escaños que podríamos ganar"
Por ejemplo, según AdImpact, Ruben Gallego tiene una ventaja de 57 millones de dólares sobre Kari Lake en Arizona, mientras que Jacky Rosen y Tammy Baldwin superan por 41 millones a sus respectivos rivales en Nevada y Wisconsin, Sam Brown y Eric Hovde.
Los demócratas también corren en ventaja (aunque menor) en Michigan y Montana, mientras que los republicanos los superan en Pennsylvania, donde Dave McCormick espera retirar al titular Bob Casey. En Maryland, una elección que podría llegar a ser reñida gracias a que Larry Hogan aceptó ser el candidato republicano, los republicanos llevan gastado 9 millones de dólares más que los demócratas.
En este contexto, Jason Thielman, director ejecutivo del Comité Senatorial Nacional Republicano, se mostró preocupado por las diferencias financieras entre los candidatos.
“Lo único que nos impide tener una gran noche en noviembre es la enorme disparidad financiera que enfrenta actualmente nuestro partido. Estamos en camino de ganar la mayoría, pero a menos que algo cambie drásticamente en las próximas seis semanas, perderemos escaños que podríamos ganar”, expresó recientemente.
La estrategia de los republicanos para recuperar el Senado
Con la Cámara Alta en 51-49 a favor de los demócratas, los republicanos deberán voltear al menos dos asientos entre los ocho que consideran accesibles para recuperar la mayoría.
A diferencia de su predecesor al frente del NRSC, Rick Scott (R-FL), quien decidió no involucrarse en el proceso de primarias, Daines optó por una estrategia más agresiva en el proceso de primarias. El senador de Montana respaldó directamente a los candidatos con mejor capacidad de financiamiento y más chances de imponerse en las urnas.
Con este criterio, Daines le otorgó su visto bueno a Dave McCormick, Jim Justice, Mike Rogers, Sam Brown, Tim Sheehy, Bernie Moreno y Eric Hovde en los estados clave. El senador hizo lo propio con Larry Hogan en Maryland, aunque su victoria se antoja un poco menos probable que las anteriores, dado que el Old Line State tiene una marcada tendencia demócrata en elecciones federales.