Los republicanos de la Cámara de Representantes publicaron un informe de 1.050 páginas en el que denuncian la politización del FBI y del Departamento de Justicia. Los representantes del GOP, citando a varios denunciantes, aseguran que el FBI está "podrido hasta la médula".
Los representantes del Comité Judicial de la Cámara señalaron que este informe, que recoge numerosas revelaciones de denunciantes del FBI, es "el primer recuento exhaustivo de los problemas del FBI hasta la fecha, que socavan la misión fundamental de aplicación de la ley". En este sentido, revelan el agujero que en su opinión existe en el buró federal por culpa de la "burocracia politizada" por sus dirigentes:
La Oficina Federal de Investigación, bajo la administración del director Christopher Wray y el fiscal general Merrick Garland, está rota (...) El problema no reside en la mayoría de los agentes de primera línea que sirven a nuestro país, sino en la burocracia politizada del FBI.
Aquí puede consultar el informe completo:
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Los problemas del FBI: "Corrupción, abusos y sesgo político contra los conservadores"
En el informe, los republicanos de la Cámara de Representantes detallan los problemas que padece el FBI, descritos en las revelaciones de los denunciantes. Denuncian que la agencia mantiene una "cultura sistémica de de rendición de cuentas" llena de "corrupción, manipulación y abusos desenfrenados".
Los denunciantes describen cómo el FBI ha abusado de sus autoridades policiales para fines políticos, y cómo las acciones de su dirección muestran un sesgo político contra los conservadores. Voz Media accedió al informe en el que los representantes republicanos extraen algunas conclusiones de la actuación "politizada" del FBI:
-El FBI está inflando artificialmente las estadísticas sobre el extremismo violento doméstico en la nación. Los denunciantes han descrito cómo la dirección del FBI está presionando a los agentes de línea para reclasificar los casos como extremismo violento doméstico incluso si el asunto no cumple los criterios. También explicaron cómo el FBI está tergiversando la escala del extremismo violento doméstico al categorizar las investigaciones relacionadas con el 6 de enero como casos orgánicos que se derivan de las oficinas locales, en lugar de estar relacionados con un único incidente. De ambas operaciones se extrae que el extremismo violento doméstico es la mayor amenaza para la seguridad nacional.
-El FBI está abusando de sus autoridades antiterroristas para investigar a los padres que hablaron en las reuniones del consejo escolar. Los denunciantes revelaron que, poco después de que la Asociación Nacional de Consejos Escolares instara al presidente Biden a utilizar la Ley Patriótica contra los padres estadounidenses, la División de Contraterrorismo del FBI creó una "etiqueta de amenaza" especial para rastrear los casos relacionados con los consejos escolares.. Los denunciantes aportaron pruebas de cómo el FBI abrió investigaciones contra una madre por haber dicho a la junta escolar local "vamos a por ti" y a un padre y a un padre simplemente porque "está en contra del gobierno" y "tiene muchas armas".
-El FBI ha abusado de sus autoridades de inteligencia extranjera para espiar a ciudadanos estadounidenses, incluyendo a personas asociadas con la campaña del presidente Trump en 2016. Estos hechos han sido documentados en informes del Inspector General y en dictámenes del Tribunal de de Inteligencia Extranjera, y hay pocos indicios de que el FBI haya cambiado -o esté dispuesto- a cambiar de rumbo.
-El FBI está 'limpiando' la Oficina de empleados que disienten de su agenda woke e izquierdista. El FBI está buscando activamente "purgar" a los empleados que tienen opiniones conservadoras (en opinión del presidente Biden, de aquellos que son una "amenaza para la democracia estadounidense") porque tienen opiniones conservadoras. El FBI incluso ha tomado represalias contra al menos uno de los denunciantes.
-Los denunciantes explicaron cómo la "intromisión política" del FBI "está arrastrando a la parte criminal", ya que los recursos son "retirados" de la verdadera función del buró. Como ejemplo principal, un denunciante describió que le "dijeron que las investigaciones de material de abuso sexual infantil ya no eran una prioridad del FBI y debían remitirse a las agencias locales de aplicación de la ley" para que él pudiera trabajar en un caso con carga política dirigido por Washington. Esta falta de prioridad no sólo es una negligencia del deber, sino que es un grave perjuicio para las víctimas de delitos que no promueven la agenda política del FBI.
Los representantes republicanos señalaron que "los recientes ejemplos de mala conducta deben examinarse adecuadamente en el contexto de años de graves abusos del FBI
y del Departamento de Justicia. Por ello, cuando es necesario para el contexto y la explicación, este informe incluye un análisis de la mala conducta y los abusos evidentes en el Departamento de Justicia".
