Mientras crecen los rumores de -y las presiones para- que Israel y Hamás amplíen el plazo del alto el fuego, la desconfianza ha vuelto a ser la protagonista de las relaciones entre ambos. Las autoridades israelíes se mostraron preocupadas por la lista facilitada por el grupo terrorista con el nombre de los últimos 11 rehenes que liberarían hoy para completar los 50 pactados. También surgieron problemas con los nombres de los terroristas presos que el Estado Judío debería poner en la calle.
Announcement by the Prime Minister's Office-Coordinator for the Hostages and Missing:
Discussions are being held on the list that was received overnight and which is now being evaluated in Israel. Additional information will be issued when possible.
— Prime Minister of Israel (@IsraeliPM) November 27, 2023
Discusiones en el Gobierno israelí
A pesar de que la Administración Biden, por boca de portavoces y el mismo presidente, expresaron su deseo de que se prolongara el alto el fuego, e incluso indicaron que Israel y el grupo terrorista parecían ver con buenos ojos la idea, la realidad es que ambas partes están estudiando la posibilidad mientras se preparan para reanudar los combates. Según la Oficina del Primer Ministro, los miembros del Gobierno están discutiendo qué hacer.
Según un funcionario, que habló con Reuters en condición de anonimato, Hamás habría expresado su acuerdo con ampliar al menos un día más el cese de las hostilidades, mientras que las autoridades judías se habrían mostrado de acuerdo con aceptar detener un día extra la operación terrestre en Gaza por cada 10 rehenes liberados. Además, abriría la prisión a tres terroristas por cada uno de los secuestrados.
Qatar intenta acercar posturas
Según informa Reuters, la situación empeoró entre ambos contendientes tras la liberación de los 17 rehenes durante el tercer día y la entrega por parte de los terroristas de la lista de los 11 últimos rehenes que pretenden liberar. Según la agencia, los terroristas tampoco parecen estar de acuerdo con los presos que volverían a las calles a cambio.
Siempre de acuerdo con la agencia, los mediadores qataríes estarían trabajando contrarreloj con ambos bandos para tratar de alcanzar un acuerdo lo antes posible que evite retrasos -como ocurrió el sábado- y una escalada de tensión.
