Alerta en Japón: el país, al borde del colapso a causa de los récords negativos en natalidad

El Gobierno nipón estima que tiene seis años para revertir su despoblación antes de que sus efectos acaben con el bienestar.

Japón mantiene su tendencia a la baja en natalidad. El país se enfrenta a una dura crisis poblacional que disminuye fuertemente los nacimientos y los matrimonios, lo que reduce la población del país a pasos agigantados. Es el octavo año consecutivo en el que se reducen los nacimientos en Japón.

Las autoridades consideran que la situación en crítica. En 2023, el peor año para los nacimientos desde que hay registro, se contabilizaron tal solo 758.631 niños nacidos en Japón. Supone un descenso del 5,1% respecto a los años anteriores, de acuerdo con los datos del Ministerio de Sanidad a los que tuvo acceso AP.

Los matrimonios también pasan por un importante receso. En 2023, fueron un 5,9% menos que el año anterior. Tan solo 489.281 parejas decidieron unirse de manera formal. Cabe recordar que, en 2019, se estimó que un cuarto del total de la población japonesa con menos de 40 años nunca había mantenido relaciones sexuales. El 25% de los adultos en edad de tener hijos son vírgenes. Cuando la edad se reduce a la juventud, el dato alcanza prácticamente la mitad de ese grupo poblacional. Estos datos son unas de las razones que explican el declive de los nacimientos.

De acuerdo con AP, las encuestas japonesas sugieren que la población joven rechaza al matrimonio y a formar una familia por la situación laboral en la que se encuentra o de la que tiene perspectivas. Los costes de vida aumentan a un ritmo mucho más elevado que el de los salarios y la precariedad es casi una máxima entre los menores de 40 años en Japón.

Alerta en el Gobierno

El Gobierno japonés es consciente del peligro que corre su país. Japón podría entrar en una espiral mortal si en los próximos seis años no se logra revertir el decrecimiento poblacional. "El periodo de los próximos seis años, más o menos, hasta 2030, cuando la población más joven empezará a disminuir rápidamente, será la última oportunidad que tengamos de invertir la tendencia", afirmó el secretario jefe del Gobierno japonés, Yoshimasa Hayashi. "No hay tiempo que perder".

Se estima que la población de Japón, que cuenta 127 millones en 2023, pase por debajo del umbral de los 100 millones a partir de 2056. De acuerdo con otros datos de AP, se estima que en 2070 los japoneses serán tan solo 87 millones. El peligro reside en cómo estas cifras, y su reparto en la pirámide poblacional, afectarán a la economía del país y a su seguridad nacional.

El primer ministro Fumio Kishida advirtió que la baja natalidad es la mayor crisis a la que se enfrenta en país en muchos años. Su Gobierno prometió tomar medidas para incentivar que los jóvenes realcen la población, pero no hay garantías de que las políticas estatales vayan a tener algún resultado positivo en los próximos años.

En otras sociedades, como Europa, las izquierdas proponen unas políticas de inmigración mucho más permisivas para hacerle frente a la despoblación y a la baja natalidad. Dichas políticas causarían un gran remplazo poblacional y cultural en Europa, amenazada con desaparecer. En Japón este escenario no se contempla de la misma forma, debido al hermetismo de su sociedad y a la poca acogida generalizada a extranjeros y otras culturas.