El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aterrizó este martes en el Aeropuerto Internacional de Pekín para reunirse con su "querido amigo", el presidente de China, Xi Jinping, y participar en el tercer foro de la Franja y la Ruta que se celebrará en la capital china este miércoles.
Es la tercera vez que Putin acude a este foro, tras participar también en los que se celebraron en 2017 y 2019. Un evento que, aseguró él mismo en declaraciones recogidas por Reuters, se diferencia de los demás coloquios organizados por otros países en que "nadie impone nada a los demás":
En mi opinión, la principal ventaja del concepto de cooperación propuesto por China es que, dentro del marco de la cooperación, nadie impone nada a los demás. Ésta es la diferencia entre la Iniciativa de la Franja y la Ruta del presidente Xi Jinping y otros proyectos llevados a cabo por países con un sabor colonialista.
La relación entre Putin y Xi Jinping
La visita es también una demostración de la cooperación "sin limites" entre ambos países. Una alianza que se ha reforzado durante la guerra entre Rusia y Ucrania, especialmente a nivel energético. Recuerda NBC que los acuerdos comerciales entre las dos potencias permitieron a Rusia exportar cerca de 2 millones de barriles de petróleo al día a China. Además, Moscú manifestó sus intenciones de construir un segundo gasoducto hacia China.
La reunión entre Putin y Xi Jinping permitirá a ambos mandatarios discutir sobre otros asuntos de ámbito internacional. De esta forma, aseguró un portavoz del Kremlin, se espera que durante el encuentro ambos presidentes mantengan una conversación sobre la posición que tomarán tanto Rusia como China en el conflicto palestino-israelí. Una reunión que tendrá lugar el mismo día en el que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, viaje a Israel.
