La mortalidad infantil aumentó en los Estados Unidos luego de 20 años. Así lo informó el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). De 2021 a 2022, la agencia gubernamental encontró un 3 % de aumento, con cuatro estados experimentando un crecimiento significativo: Georgia, Iowa, Missouri y Texas.
El mencionado 3 % de aumento implica 5,60 muertes infantiles por cada 1.000 nacidos vivos. Además, la tasa de mortalidad de los recién nacidos aumentó un 4 por ciento.
“La tasa de mortalidad infantil de Estados Unidos aumentó un 3 % de 2021 a 2022, el primer aumento interanual de la tasa desde 2001 a 2002. De 2002 a 2021, la tasa de mortalidad infantil disminuyó un 22%”, informó la CDC en un informa.
NEW – CDC Data Shows the Infant Mortality Rate Increased for the First Time in 20 Years in 2022, Experts are Baffled
"This is the first we've seen this rate go up in about two decades. More deep dive and drill down will be needed to understand the reasons...There's a bigger… pic.twitter.com/CY9XDYcRIK
— Chief Nerd (@TheChiefNerd) November 1, 2023
En cuanto a los aumentos por estado, Georgia, Iowa, Missouri y Texas lideraron, mientras que Nevada fue el único estado que mostró caídas significativas. Los cambios en los estados restantes y el Distrito de Columbia no fueron significativos.
En cuanto a las principales causas de mortalidad infantil observadas por la CDC, hubo dos que registraron aumentos significativos: las complicaciones maternas del embarazo y la sepsis bacteriana de los recién nacidos. A su vez, la principal causa durante el 2022 fue la malformación congénita.
"El aumento registrado en las tasas de mortalidad infantil es preocupante y decepcionante", declaró la Dra. Sandy L. Chung, presidenta de la AAP.
"Vivimos en un país con abundantes recursos. Sin embargo, la tasa de mortalidad infantil en Estados Unidos es escandalosamente alta. Hay muchas razones para ello. Sabemos que las familias pobres se enfrentan a muchos retos, como el acceso a alimentos nutritivos y a una asistencia sanitaria asequible. Las disparidades raciales y étnicas relacionadas con una atención sanitaria accesible -incluidos los servicios de salud prenatal- son sólo una de las muchas posibles razones del menor peso de los bebés al nacer y, en ocasiones, de la mortalidad infantil", añadió.
En cuanto a las tasas de mortalidad por demografía, el aumento más llamativo se vio en bebés de mujeres no hispanas, indias americanas y nativas de Alaska (de 7,46 por 1.000 nacidos vivos a 9,06) y de mujeres blancas no hispanas (de 4,36 a 4,52).
A su vez, las tasas de mortalidad aumentaron ligeramente para los bebés de mujeres negras no hispanas (10,55 a 10,86), mujeres hispanas (4,79 a 4,88) y mujeres no hispanas nativas de Hawaii u otras islas del Pacífico (7,76 a 8,5). La única raza que experimentó una disminución fue la de las mujeres asiáticas no hispanas (3,69 a 3,5).
