Pánico demócrata: el analista James Carville alerta sobre la fuga de hombres hispanos entre votantes demócratas
El estratega político cree que hay demasiados sermones en el partido que persiguen ciertos modos de vida de los estadounidenses.
El veterano estratega político James Carville pasó por los micrófonos del podcast de Donny Deutsch para comentar la actual situación del Partido Demócrata de cara a las elecciones presidenciales de este noviembre. Carville aseguró en la entrevista que la formación de Joe Biden tiene un problema con los hombres, y concretamente con los hombres hispanos. "Los vamos a p*to perder", aseguró el analista político.
Las declaraciones de Carville están apoyadas por los números de las últimas encuestas que muestran como el número de votantes hispanos recula entre el electorado demócrata, a favor de los republicanos. Los últimos datos muestran que entre los hispanos de clase trabajadora, Trump y Biden ya están empatados con un 31%.
De acuerdo con Carville, este trasvase de votos es más pronunciado en el caso de los hombres hispanos. El analista apunta directamente a los liderazgos en el Partido Demócrata.
"Tenemos un enorme problema con los hombres en todos los ámbitos, pero en particular -odio este término, pero lo usaré- con las 'comunidades de color', como si todas las personas que no son blancas fueran iguales. Es estúpido", declaró Carville. "Y creo, y la gente se enfadó un poco conmigo cuando se lo dije al New York Times, que la cultura demócrata tiene demasiados sermones femeninos. Es demasiado: 'No comas hamburguesas, no veas el fútbol, ponte condón'. Como, tío, mi*rda, déjame en paz, ¿vale? Tengo una maldita vida que llevar. Sabes, un tío trabaja en un taller de reparación de neumáticos en los suburbios de Atlanta, el hijo de p*ta trabaja 50 horas a la semana, gana 16,50 dólares a la hora, y quiere ver el partido de fútbol, y quiere fumar dr*ga y beber cerveza".
El analista, que ha trabajado durante décadas para el Partido Demócrata, cree que la principal causa de este fenómeno en la "condensación cosmopolita" que se ha convertido en la vertiente dominante del partido.